La Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (ANICE) rechaza rotundamente las informaciones vertidas en estos días a los medios de comunicación por el sindicato Comisiones Obreras (CC.OO.), en las que se hacen valoraciones sobre empresas cárnicas que supuestamente tienen falsos autónomos trabajando en sus instalaciones.
Estos datos son meras apreciaciones que no se atienen a la verdad y perjudican gravemente la imagen de la industria cárnica española y la reputación de sus empresas, ya que el sector siempre está del lado de la legalidad y anima en todo momento a sus empresas a cumplir estos compromisos.
Además, este sindicato tiene constancia de que, desde las organizaciones empresariales, estamos insistiendo y apoyando que el Ministerio de Empleo proporcione un marco legal que evite las incertidumbres y lagunas legales que representa hoy el uso de las cooperativas de trabajo asociado, todo ello con el fin de dar las máximas garantías a los trabajadores y seguridad jurídica a las empresas.
Por ello, ANICE se ha dirigido a CC.OO. pidiendo la retirada de esas informaciones, ya que ninguno de los operadores señalados por Comisiones Obreras ha tenido ninguna sentencia en la que se señale que contrata falsos autónomos, y por el contrario, son muchas las que han tenido pronunciamientos positivos de la justica avalando el empleo de las cooperativas de trabajo asociado.
Resulta sorprendente este tipo de afirmaciones puesto que la figura de las cooperativas de trabajo asociado lleva funcionando en nuestra economía desde hace más de 20 años, y han sido durante todo este periodo de tiempo una fórmula de contratación de servicios legal y amparada por la Administración y avalada en numerosas ocasiones tanto administrativa como judicialmente.
Los mismos inspectores de trabajo que ahora están sancionando a industrias cárnicas por la utilización de esta fórmula han visitado e inspeccionado sistemáticamente a las empresas durante años, considerando siempre correcto y ajustado a la normativa su proceder. Hay incluso diversas sentencias judiciales en este sentido. Sin embargo, en los últimos tiempos el Ministerio de Trabajo ha adoptado un cambio de criterio que es el que ha motivado este nuestro conflicto.
Detrás de esta iniciativa solamente se esconde un deseo de protagonismo de este sindicato que va perdiendo representación en el sector. ANICE espera y anima a los trabajadores y trabajadoras del sector a que tomen nota de esas afirmaciones, porque nadie mejor que ellos sabe que no se atienen a la verdad.
ANICE valora muy positivamente el diálogo social, no sólo como instrumento para la resolución de los problemas del sector, sino como mecanismo de avance y progreso de nuestra industria, como lo avalan los más de 30 años de existencia de un Convenio Colectivo que es referencia y modelo del resto de la industria alimentaria.
Sin embargo, actuaciones como la protagonizada por Comisiones Obreras no solamente no construye ni tiende puentes, sino que favorece la crispación y dificulta el diálogo.
Llegados a este punto, es necesario abordar una solución integral a esta problemática, que aporte garantías a los trabajadores y seguridad jurídica a las empresas sin abocar a la desaparición a algunas de nuestras compañías más punteras bajo unas actuaciones inspectoras sustentadas en principios jurídicamente cuestionables.