La industria agroalimentaria gallega tiene una importancia capital para la economía de la comunidad en general y, en particular, para las comarcas en las que se establece. De hecho se calcula que este sector está formado por unas 1.700 empresas, que alcanzan una facturación superior a 4.600 millones de euros y dan trabajo a cerca de 17.000 personas.
Destacan las industrias lácteas, cárnicas y de alimentación animal que facturan más del 90% del total. Son también muy relevantes las industrias vinícolas que, aunque su facturación no llega al 5%, representan en número cerca del 40% del total, por lo tanto con gran relevancia en diferentes zonas territoriales de Galicia.
De hecho, el sector agroindustrial es clave en el equilibrio territorial y en el desarrollo de las economías locales, prueba de eso es que cerca del 60% de las empresas se sitúan en ayuntamientos de menos de 10.000 habitantes y el 75% de ellas tienen la categoría de microempresas.
Apoyo económico
Por todo ello, la Consellería de Medio Rural apoya la este sector a través de dos líneas de ayuda, de una banda para inversiones en transformación y comercialización de productos agrarios cofinanciadas por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader) y para la elaboración y comercialización de productos vitivinícolas, financiadas por el Fondo Europeo Agrícola de Garantía (Feaga).
A través de estos instrumentos de apoyo, la industria agroalimentaria recibió entre 2007 y 2015 (período del último Programa de Desarrollo Rural, PDR) casi 183 millones de euros, que sirvieron para apoyar 1.521 proyectos, con una inversión total de más de 524 millones de euros. Ya durante lo actual PDR van 204 proyectos aprobados con una inversión de más de 136 millones de euros y una subvención concedida superior a los 49 millones de euros. Las cifras de estos dos últimos años muestran que hay una fuerte dinámica inversora en este sector, algo que celebra la Xunta de Galicia por la repercusión que tiene para los vecinos.
Por sectores
Por sectores destacan las inversiones en el lácteo y en el cárnico, los sectores de más peso en nuestra comunidad. En concreto, en el período 2007-2017, el sector cárnico representó el 17% de los proyectos y de las ayudas concedidas y en el lácteo, el porcentaje de proyectos inversores fue del 13%, pero acumuló casi un 27% de las ayudas concedidas.
En cambio, en el período más reciente, los años 2016 y 2017, ya con el actual PDR, se puede apreciar un significativo aumento de peso relativo a los en el sector lácteo, que superaron el 50% de las ayudas totales concedidas e incluyeron expedientes de empresas que apuestan claramente por la diversificación y el incremento del valor añadido de la leche, uno de los grandes retos de futuro.
También es de destacar el dinamismo inversor del sector vitivinícola, que en el mencionado período acumuló más del 48% de los proyectos aprobados y un 19% de la subvención concedida.