Proyectos Bodegas 4.0

La gestión sostenible del agua, clave para la competitividad de las bodegas

  • Vitartis participa en un proyecto de investigación, que se encuentra en su segunda fase de ejecución, cuyo objetivo es aportar una solución de ahorro de agua y prevención de vertidos en las bodegas

Agronews Castilla y León

15 de abril de 2023

industrias, vitivinícola

El sector agroalimentario, como gran consumidor de agua, se enfrenta al reto de su correcta utilización tanto en los procesos, como en el posterior tratamiento y gestión de efluentes contaminados. Y es que, el uso eficiente de este recurso finito y escaso es una de las principales preocupaciones actualmente en el mundo.

Por eso, la Asociación de la Industria Alimentaria de Castilla y León, Vitartis, participa junto con otras seis entidades en el proyecto ‘Bodegas 4.0: Digitalización y reutilización de aguas en el sector bodeguero’, que pretende aportar una solución de ahorro de agua y prevención de vertidos en las bodegas, buscando tecnologías y herramientas de gestión innovadoras.

Además de Vitartis, en el proyecto, que se encuentra en su segunda fase de ejecución, participan el Clúster para el uso eficiente del agua (ZINNAE), tres pymes proveedoras de tecnología (Velaber Consulting, ACAI depuración e INAR Tecnologías y Soluciones) y dos bodegas: Grupo Yllera, socio de Vitartis, y Bodegas Aragonesas.

Según explica el director de proyectos de Velaber Consulting, Ángel Martínez, el sector bodeguero es un gran consumidor de agua, fundamentalmente en la realización de trabajos de limpieza y lavado. “Dado que la carga contaminante de estas aguas resultantes no es particularmente alta durante la mayor parte del tiempo, las tecnologías de este proyecto pueden conseguir altos rendimientos en regeneración y reutilización de aguas”, señala. Además, la presencia relativamente habitual de viñedos y otros cultivos cercanos facilita su reutilización.

Los consumos son muy elevados y proporcionales al tamaño de la bodega y su producción; y se utiliza sobre todo en el lavado de barricas, botellas y depósitos, además de otras tareas de limpieza de elementos de menor consumo.

Optimización de procesos

Por su parte, el socio y cofundador de Inar Tecnologías, Rubén Blasco Marín, subraya que la digitalización es “clave en la optimización de procesos”, ya que en una primera instancia permite cuantificar de forma objetiva multitud de factores involucrados en el mismo; posteriormente, optimizar el proceso; y por último, el modelado y tratamiento automatizado de los datos, lo que permite “generar información relevante, en muchos casos en tiempo real, redundando en un mejor control y gestión del mismo”.

En el caso concreto de este proyecto, la medida individualizada de los caudales de agua que intervienen en cada uno de los procesos, así como de su carga contaminante, ha conducido de “forma inequívoca a aportar datos objetivos para la mejora del uso de un recurso tan valioso como es el agua, reduciendo su consumo y valorando su potencial de reutilización en otros usos como, por ejemplo, el riego”.

En este sentido, el director técnico de ACAI Depuración, Javier Salamero, apunta que durante la última década el reto para el sector bodeguero ha sido elegir las tecnologías que mejor se adaptan a su contexto: mucha actividad en pocas semanas del año, que es cuando llega a la depuradora más caudal y carga contaminante.

“En torno al 60% del consumo de agua se produce en el periodo de vendimias, llegando a ser el caudal diario el 2% del anual”, señala Salamero. Debido al contenido de azúcares en el vertido, las cargas contaminantes son elevadas, ya que se requiere mucha demanda de oxígeno para oxidarla, es decir depurar.

Reutilización de aguas

Uno de los retos planteados en ‘Bodegas 4.0’ es la reutilización de aguas, un ámbito en el que no hay muchas experiencias. En concreto, a partir de plantas piloto de tratamiento y regeneración, se obtiene agua regenerada de diferentes calidades y se analiza en qué procesos se puede reutilizar, manteniendo la seguridad alimentaria.

De momento, algunos de los usos más habituales del agua regenerada son la limpieza de algunas zonas (la depuradora, lavado de maquinaria agrícola, baldeo de zonas externas) y riego de zonas ajardinadas. Cuando la bodega dispone de plantación de viñas, pueden existir más posibilidades de reutilización.

“En un futuro no muy lejano se podrá plantear reutilizar el agua con más seguridad, empleando mejores tecnologías”, augura Javier Salamero. Y recuerda que a nivel urbano ya se está aplicando; de hecho, en ciudades como Los Ángeles, desde hace 50 años se recargan acuíferos con agua residual tratada. Desde esos acuíferos, el agua se vuelve a captar para su uso a través de las redes de abastecimiento.

Para ello, pueden emplearse múltiples tecnologías, con rendimientos y resultados variados y con diferentes grados de complejidad. Desde la más sencilla, que sería la filtración convencional con la desinfección del agua con hipoclorito, a las más complejas, como son la electro-oxidación, la electrocoagulación y la filtración con membranas en diferentes grados: microfiltración, ultrafiltración, nanofiltración y ósmosis inversa.

‘Bodegas 4.0’ está utilizando tecnología de membranas, por su facilidad de uso y la posibilidad de obtener agua de diferente calidad en función del tipo de membrana.

La bodega debe saber bien dónde se va a reutilizar el agua; un paso determinante para elegir la tecnología de regeneración. Los siguientes pasos deben dirigirse a optimizar el funcionamiento de la depuradora, antes de abordar la etapa de regeneración. Después, lo más recomendable es llevar a cabo un pilotaje de la tecnología elegida, a fin de testear in situ los resultados y la calidad del agua obtenida.

Retorno de la inversión

En cuanto a la inversión, el director de proyectos de Velaber Consulting incide en que las tecnologías desarrolladas y probadas en el proyecto ‘Bodegas 4.0’ son de pequeño tamaño y cuentan con la ventaja de poder operar 24/7, generando finalmente un gran retorno de inversión, que no procede tan solo del consumo de agua (y su bombeo de pozo en su caso), sino también del canon de vertido debido al agua contaminada que debe salir.

Gracias a esta iniciativa, se reducen tanto su caudal como su coste por m3, al contener una menor carga contaminante (que puede ser separada y eventualmente valorizada).

Esta iniciativa, cuya segunda fase comenzó en septiembre y finaliza este mes de abril, cuenta con el respaldo de las convocatorias de octubre de 2021 y junio 2022 de apoyo a AAEEII del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, financiada por la Unión Europea – Next Generation EU.



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