
Cobadu ha inaugurado su primera Granja Experimental, un proyecto que parte del departamento de Nutrición de la cooperativa, en colaboración con la Universidad Politécnica de Madrid. La localidad zamorana de Cerecinos del Carrizal ha sido el municipio elegido para situar esta nueva instalación, que realmente son dos granjas en una, pues tendrá una parte destinada a corderos y otra a terneros.
El director técnico del proyecto y responsable de nutrición, Eduardo Bueno, ha señalado que “se trata del único centro de este tipo que existe en España ya que la granja contará con 60 terneros, separados en cuatro grupos de 15 animales cada unos, además de 120 corderos divididos en doce grupos de diez”.
El funcionamiento de esta nueva granja consistirá en medir la cantidad de pienso y agua que consume cada animal, realizando un pesaje instantáneo antes y después de cada ingesta. Los datos, que serán recogidos en una sala de control situada en la granja, se enviarán directamente a los expertos de la Politécnica para tratarlos, y volcarlos posteriormente en Cobadu. Con esta herramienta, los responsables de la cooperativa tendrán datos objetivos para hacer una selección de la alimentación más adecuada, y poder transmitírselo directamente al amplio colectivo de ganaderos de vacuno y ovino de su área de actuación.
Para obtener toda esa información, Cobadu ha dotado a la nueva granja experimental de un moderno sistema de automatizado. Cada animal llevará en el crotal un chip que lo identificará cada vez que se acerque al comedero o al bebedero para saber que cantidad de pienso y de agua consume cada ejemplar a lo largo del día, y en cuantas tomas. Una báscula de precisión medirá los gramos de comida y los centilitros de agua que van saliendo en cada momento. Además los terneros serán pesado de forma automática en el propio túnel después de cada ingesta y los corderos se pesarán una vez a la semana.
Eduardo Bueno, confirmó que el proyecto es un I+D+i que “va a aportarnos datos, si no medimos y controlamos, nos será mucho más difícil mejorar”. El proyecto de Cobadu se apoya en la Universidad Politécnica de Madrid, con el profesor Vicente Jimeno al frente, uno de los mayores expertos en el área de rumiantes de España, cuyos estudios sobre el control de la alimentación animal son referentes.
La inauguración del acto contó con la presencia de la jefa del servicio de Agricultura y Ganadería de la Junta, Rosa Alonso, y con el director general de la cooperativa Bajo Duero, Rafael Sánchez Olea, quién dio la bienvenida a las decenas de invitados al acto, entre los que se encontraban representantes y empleados de Cobadu, de otras cooperativas y empresas. “Espero firmemente que estos datos nos aporten las herramientas necesarias para trasladarle a nuestros socios los resultados de un estudio único”, ha comentado Sánchez.
Por otra parte, la granja experimental de Cerecinos del Carrizal, lleva el nombre de Manuel Luelmo, veterinario de la cooperativa que falleció hace cinco año. La emoción del acto de inauguración llegó cuando la viuda de Manuel Luelmo descubrió una placa en su memoria. Eduardo Bueno, dedicó unas entrañables palabras al que fuera su compañero de trabajo destacando su calidad profesional y humana.