La localidad zamorana de Tábara celebró recientemente una jornada, la segunda, sobre el cultivo de los pequeños frutos en la provincia que estaba organizada por la Diputación Provincial en colaboración con el grupo de Acción Local ADATA y el ayuntamiento tabarés.
Durante la jornada los ponentes de la empresa Campoberry de Cantabria explicaron a los participantes los canales y sistemas de comercialización en un cultivo que tiene unas necesidades específicas antes y después de la cosecha, lo que requiere de cuidados y de una cierta profesionalización para lograr frutos de óptima calidad y adecuados para la exportación.
Según los expertos, la producción de pequeños frutos se considera un cultivo muy interesante para la comarca de Aliste y Sanabria, como renta complementaria y yacimiento de empleo.
Dentro de este sector, la comercialización en ecológico tiene mucho potencial, según informaron los ponentes, ya que en la actualidad existe una demanda muy superior a la producción, lo que implica un incremento considerable del precio con relación al cultivo convencional. De este modo, en su opinión el futuro de los pequeños frutos está en la agricultura ecológica.
La jornada se celebró en el edificio del Reloj, de Tábara, organizada por el servicio de Agricultura de la Diputación, en colaboración con el ayuntamiento de Tábara y el Grupo de Acción Local ADATA, una actividad que ha sido incluida dentro de las acciones del proyecto FRONTUR de “Cooperación para la promoción de los recursos turísticos de la Frontera”, financiado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) como proyecto de Cooperación Transfronteriza España Portugal (2014-2020).
Esta jornada ha sido continuidad a la celebrada a principios del mes de mayo y que congregó también a numerosos participantes interesados en el cultivo de los pequeños frutos, centrándose sobre todo en el arándano, la grosella, la frambuesa y la mora. La primera charla ofrecida por expertos en la materia se basó fundamentalmente en el arándano cuyas posibilidades se pueden dar sobre todo en las comarcas de Aliste y Sanabria por sus suelos ácidos y el clima adecuado para este fruto.
En cuanto a la grosella, que ocupó la segunda parte de la jornada, los expertos explicaron que se trata de un cultivo “menos demandado” que el arándano en España pero con un gran potencial de exportación. La zarzamora también despertó un gran interés entre los participantes de las jornadas.
En la provincia de Zamora existen varias explotaciones que se dedican al cultivo de pequeños frutos como pueden ser las moras y que están teniendo un gran éxito entre los agricultores que se dedican a ello.
