La Alianza UPA-COAG de Burgos reclama a las administraciones que pongan en marcha una batería de medidas de apoyo para el sector apícola de la provincia.
La organización recuerda que es imprescindible que se dote de apoyo a un sector que resulta básico a nivel profesional y social, puesto que no podemos olvidar que “sin abejas no habrá vida”.
La Alianza UPA-COAG de Burgos apunta que 2022 ha sido un año nefasto porque las altas temperaturas y la sequía han reducido la producción en un 50%, y a todo ello se une la subida de los costes de producción, lo que ha dejado a muchas explotaciones sin liquidez y al borde de la quiebra.
La situación es especialmente grave para los profesionales del sector por un bloqueo en los mercados de nuestras mieles, por la decisión de dejarnos fuera de la bonificación de los 20 céntimos del gasóleo y por la intención del Ministerio de Agricultura de dejar de tratar a las abejas como especies menores y obligarnos a tener un veterinario y un plan integral sanitario. “Sería completamente inviable y además no nos aportaría ninguna solución porque la enfermedad que tienen las abejas es la varroa, producida por un ácaro, y no hay productos para combatirla”.
En ese sentido, la Alianza UPA-COAG de Burgos reclama soluciones de forma urgente, porque nunca antes tantas circunstancias habían puesto al límite la labor de los profesionales del sector. La enumeración es tan larga como: el desplome de precios de nuestras mieles debido a la gran cantidad de miel extranjera, el fraudulento etiquetado debido a que en nuestro país no se incluye el porcentaje de la miel que es extranjera, la exclusión de la bonificación de los 20 céntimos, la falta de tratamientos con cada vez mayor mortandad, el incremento del coste de más del 100 % del alimento apícola y de los tarros y el aumento geográfico de la Vespa Velutina.
