Preocupados. Así están mirando al cielo en estos momentos los agricultores de toda la comunidad que ven que cada mañana los cielos grises, las lluvias y las tormentas no se van, lo que provoca que no puedan rematar adecuadamente las cosechas de la campaña anterior. Y aún peor, que se esté retrasando la siembra de la siguiente campaña: “Todo ello está provocando una gran preocupación en los regantes, ya que ocasionará reducciones drásticas en la producción y en los ingresos de los profesionales del campo” asegura Ángel González Quintanilla, presidente de Ferduero.
El lunes las entidades se reúnen con caracter de urgencia
Las predicciones para los próximos días no parecen cambiar mucho la situación, así que los trabajadores aumentan su incertidumbre sin saber cuándo ni cuánto van a poder recoger. Según Ferduero, a ello se suman otros motivos como las condiciones de la PAC, la amortización de las inversiones acometidas en los últimos años, el retraso en el pago de los subvenciones o los precios nada favorables de los productos agrícolas que de seguir así, según el organismo podrían llevarles a una “situación catastrófica” en el campo.
El próximo lunes las entidades asociadas mantendrán una reunión con carácter urgente para analizar la situación,ver si la gravedad no solo afecta a los regantes de la cuenca del Duero sino de otras provincias. Además elaborarán una solicitud conjunta a las administraciones para tomar medidas inmediatas.