Diferentes organizaciones y organismos de una veintena de grandes ciudades europeas se reunirán los próximos días 21 y 22 de septiembre en Cracovia (Polonia) bajo el marco de las jornadas “Ciudades y Comida – Conectando Consumidores y Productores” organizada por EIP-AGRI Grupo de Canales cortos de producción (SFC, por sus siglas en inglés), perteneciente a la Comisión Europea.
El encuentro tiene por objetivo avanzar en modelos de producción de alimentos más sostenibles teniendo en cuenta el papel estratégico que juegan las grandes ciudades, ya que en ellas reside la mitad de la población mundial, o sea, de los consumidores.
Desde Fademur Madrid se han mostrado “entusiasmadas” porque esta meta implica transformaciones más amplias de lo que parece a primera vista. Y es que, explican, “existe una estrecha relación entre las políticas alimentarias y muchos desafíos, tales como la pobreza, la protección social y sanitaria, la planificación del uso del territorio, el futuro del sector energético o la capacidad de reacción ante posibles catástrofes”. Por ello, los canales cortos de producción, que siempre ha defendido y promovido Fademur, se postulan como solución a tres grandes problemas globales: la soberanía alimentaria, la seguridad alimentaria y el cambio climático.
La presidenta de Fademur Madrid y representante de la organización en este encuentro de Cracovia, Valle Garrido, se ha mostrado orgullosa porque “esta invitación reconoce la larga experiencia de la organización conectando el mundo rural y urbano”. Garrido ha recordado que Fademur siempre ha apostado por los canales cortos de distribución para empoderar a las mujeres rurales, por lo que “la organización pondrá sus muchos años de experiencia en esta materia a disposición del EIP-AGRI”.
“Este encuentro nos demuestra que el mundo rural y urbano, aunque son muy diferentes entre sí, no son competidores y dependen uno del otro”, explica Garrido. “Nosotras tenemos mucha experiencia trabajando en la conexión entre uno y otro ya que nuestra lucha por las mujeres rurales va más allá de alcanzar la igualdad con los hombres”, ha explicado Garrido, “sino también para equiparar sus posibilidades con las de las mujeres urbanas”.
