Tomando como fuente la Encuesta de Superficies y Rendimientos de Cultivos (ESYRCE) el total de la superficie regada en España en 2016 se cifra en 3.655.417 ha y por lo tanto ha aumentado un 0,52% respecto a 2015 (3.636.519 ha) y un 1,39% respecto a 2014 (3.605.121 ha).
De esa cifra el riego localizado supone ya el 50% de los regadíos españoles con 1.850.869 hectáreas, seguido por el de gravedad que con 943.203 has que representa el 25,80%; el de aspersión que aglutina a 549.668 has que significa el 15% del conjunto nacional y el automotriz con 311.676 has que son el 8,53%
DATOS POR COMUNIDADES AUTÓNOMAS
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Andalucía cuenta con 1.078.566 hectáreas de regadío que son el 30,35% de la superficie de cultivo de la región y que representan el 30,35% del total nacional
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En segundo lugar se sitúa Castilla La Mancha con 518.293 has que significan el 13,96% de la superficie de cultivo de la comunidad autónoma y el 14% del conjunto de España
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Las 429.874 hectáreas de regadío con las que cuenta Castilla y León suponen el 12% de la hectáreas dedicadas a la agricultura de la región y el 11,76% del total nacional
Este incremento de la superficie regada en España va acompañado de un cambio en la evolución de los distintos tipos de riego. El sistema que más aumenta en los últimos años es el riego localizado (14,04%), implantado en 469.034 hectáreas nuevas desde el año 2006.
El sistema automotriz, que se ha implantado en 62.923 nuevas hectáreas de cultivo a lo largo de estos últimos 11 años, fluctúa más con los años, debido fundamentalmente a ser un sistema más propio de cultivos herbáceos. El riego automotriz se incrementa un 1,76% en 2016 respecto a 2015 y un 12,30% respecto al promedio 06/15.
En general los sistemas más tecnificados han aumentado en los últimos años en detrimento del riego por gravedad y otros sistemas.
La superficie regada por gravedad se localiza mayoritariamente entre las comunidades autónomas de Aragón (20,38%), Andalucía (18,46, Cataluña (13,49%) y Castilla y León (13,01%) debido fundamentalmente a la presencia en estas comunidades de los cultivos herbáceos. Otras comunidades donde este sistema es también importante son Extremadura (10,39%) y Comunidad Valenciana (9,29%)
El riego por aspersión se concentra mucho más que el de gravedad encontrándose en las Comunidades Autónomas de Castilla y León (25,77%), Aragón (21,41%), Castilla – La Mancha (18,32%) y Andalucía (13,38%). En su conjunto representan el 78,8% de la superficie regada por aspersión en toda España. En el resto de comunidades autónomas este sistema no supera en ninguna el 6% de la superficie total regada mediante este sistema.
La superficie regada mediante riego automotriz se distribuye fundamentalmente entre las comunidades autónomas de Castilla y León (44,84%) y Castilla – La Mancha (27,22%) suponiendo ambas el 72,06% del riego automotriz total. Salvo en Aragón donde este sistema representa el 11,11% del total nacional, en el resto de CCAA no supone más del 6% de la superficie regada por este sistema en el mejor de los casos.
Finalmente, el riego localizado, más característico de los cultivos leñosos se encuentra fundamentalmente en Andalucía (43,84%). A gran distancia se encuentran las comunidades autónomas de Castilla – La Mancha (16,71%), Comunidad Valenciana (10,73%) y Región de Murcia (8,43%).
Distribución de la superficie de riego por cultivos
Los cereales son el grupo de cultivo con mayor superficie de regadío (932.431 ha – 25,51%) seguidos por olivar (766.623 ha – 20,98%) y viñedo (366.000 – 10,01%).
Si se analiza la superficie de regadío en el total de cada uno de los grupos de cultivos, puede observarse la existencia de cultivos donde el riego es mayoritario respecto a la superficie total, debido principalmente a la necesidad de obtener rendimientos comerciales o a la misma viabilidad de las plantas, como en el caso del arroz. Así destacan los cítricos y hortalizas con un 92,88% y 89,36% respectivamente de superficies irrigadas respecto a la superficie total de los mencionados cultivos. En el lado opuesto, se sitúan leguminosas grano y cereales con un 6,09% y 14,81% respectivamente de superficie en regadío sobre el total de la superficie cultivada y en el caso de los otros cultivos leñosos (algarrobo, alcaparra, mimbrera, morera…) esta cifra se reduce al 3,73%.
El riego por gravedad se utiliza principalmente para el riego de los grupos de cereales y forrajeras, alcanzando el 49,20% y 52,56% de sus respectivas superficies de cultivo en regadío. Dentro de este tipo de riego también destacan las otras superficies de cultivo que incluyen los huertos familiares.
Olivar y viñedo se riegan casi exclusivamente con riego localizado. Más del 94% de sus superficies regadas lo están bajo esta modalidad.
El riego localizado es también el sistema mayoritario en frutales, cítricos y no cítricos (por encima del 80%), En estos cultivos también presenta una apreciable importancia el riego por gravedad con más del 17% de la superficie total regada por gravedad en el conjunto de los cultivos de frutales.
El riego por aspersión destaca fundamentalmente en los tubérculos, con el 66,56% de su superficie regada por este sistema. También tiene su relevancia en otros cultivos herbáceos como leguminosas, forrajeras y cultivos industriales donde supone más del 30% de sus respectivas superficies de regadío.
En el grupo de las hortalizas destaca el sistema de riego localizado (54,58%), donde se incluye la superficie de invernadero-. El resto de sistemas de riego también tienen importancia en este grupo, destacando la aspersión (22,02 %) la gravedad (14,15%) y por último los sistemas automotrices con el restante 9,25%.