A los pocos días de finales de 2018, los sectores agroganderos gallegos siguen sin saber si será obligatorio enterrar el estiércol cuando se aplica a fertilizar la tierra. En este momento, en Galicia, no se pueden emplear los sistemas de cañón, pero permite la utilización del de abanico -el más utilizado en la región, a través de una moratoria parece que se podría extender a 2019 aunque no se sabe nada oficialmente.
Así, desde el Sindicato Labrego Galego esta información se tiene en reuniones internas pero no se han oficializado, mientras que el gobierno regional está impulsando la compra de maquinaria con inyectores para sustituir a las de abanico.
Desde el SLG se asegura que no quieren moratorias o excepcionalidades y consideran que deben estar exentos de cumplir con su obligación de enterrar el estiércol todas las producciones agrícolas de pequeña y mediana escala, que trabajen en una amplia base territorial, ya que su actividad no tiene nada que ver con la emisión de gases de efecto invernadero que se pretende paliar .
