ASEMESA, Asociación Española de Exportadores e Industriales de Aceitunas de Mea, junto con ASAJA, COAG y UPA se han concentrado ante el Consulado de EEUU en Sevilla en defensa de la aceituna negra en un acto donde han participado la industria (envasadores, entamadores y exportadores), agricultores, cooperativas y administraciones.
El sector ha entregado en el consulado de EEUU en Sevilla un Documento en Defensa de la aceituna negra española y en contra de los aranceles antidumping y antisubvenciones impuestos por EEUU del 34,75%.
Junto a la concentración, que ha transcurrido desde las 11,00 a las 13,00 horas, se han instalado mesas para que todos los ciudadanos que quisieran pudieran respaldar al sector con la firma de un documento de apoyo. También se han distribuido gratuitamente más de 5.000 latas de aceituna negra.
La concentración se ha realizado en los días previos a la reunión de la Comisión de Comercio Internacional (ITC); organismo de EEUU que determinará si las exportaciones de aceituna negra de España causan daño o son una amenaza para la industria de EEUU. Si este organismo estableciera que no existe tal daño o amenaza, ambos aranceles (antidumping y antisubvención) quedarían sin efecto. Pero si la decisión es contraria a los intereses españoles, los aranceles impuestos el pasado 12 de junio del 34,75% se convertirán en definitivos por cinco año prorrogables otros cinco más.
El próximo día 10 de julio el ITC se reúne para votar el dictamen y el 24 de julio adoptarán formalmente dicha resolución.
ASEMESA considera que sólo quedan cinco días para intensificar la defensa de la aceituna negra de España. Por ello pedimos a la UE que utilice todas las gestiones políticas y diplomáticas al más alto nivel, con la mayor contundencia y con la mayor urgencia.
A su juicio, EEUU pone en tela de juicio el modelo de ayudas de la Política Agraria Comunitaria. La UE no puede permitir que EEUU cuestione que las ayudas que reciben los agricultores de aceituna de mesa españoles sean ilegales porque no cumplen las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC), la famosa “caja verde” de las ayudas, que hasta ahora parecía indiscutible. Si la UE permite que se pongan en duda, nuestro temor es que cualquier sector agrícola establecido en un tercer Estado podría basarse en el mismo razonamiento para solicitar la imposición de derechos anti-sunvenciones contra productos exportados desde la UE. Por eso, la UE tiene que impedir esta amenaza.
En esta guerra comercial está en juego el cierre de un mercado por diez años con pérdidas de 700 millones (70 millones de euros anuales) donde saldrán beneficiados el propio sector californiano y otros países competidores que durante el primer trimestre han aumentado sus exportaciones a EEUU de forma considerable como Egipto (+50%), Turquía (+82,3%), Marruecos (+33%), etc.
Además está en peligro más de 8.000 puestos de trabajo, dos millones de jornadas, más de 300 empresas, ubicados principalmente en Andalucía, comunidad que genera 450.000 toneladas de aceituna de mesa, el 80% de la producción.
