“El sector remolachero no se va a asustar por el final de las cuotas: organización y profesionalidad son sus fortalezas”

Agronews Castilla y León

4 de octubre de 2016

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Cerca de 150 cultivadores se han dado cita en la Jornada de Agrícola Café organizada por Editorial Agrícola, Agronews Castilla y León y la Cooperativa ACOR con el objeto de analizar la situación del sector remolachero / azucarero ante el final de las cuotas en 2017.

Alfonso Centeno alcalde de la localidad vallisoletana de Olmedo fue el encargado de abrir el encuentro destacando la importancia que para una pequeña localidad tiene la presencia de una industria del nivel de ACOR, generando empleo directo e indirecto a lo largo del año.

[[{«fid»:»29737″,»view_mode»:»media_original»,»type»:»media»,»attributes»:{«height»:667,»width»:1000,»style»:»width: 500px; height: 334px; border-width: 5px; border-style: solid; margin: 5px; float: left;»,»class»:»media-element file-media-original»}}]]Por su parte, Jesús Julio Carnero, presidente de la Diputación de Valladolid, aseguró que “hay futuro para la remolacha tras el final de las cuotas, es evidente que estamos ante un gran reto al que estoy convencido que los cultivadores van a ser capaces de hacer frente desde la base de la competitividad”.

La ponencia central de la jornada fue llevada a cabo por Carlos Rico, presidente de la cooperativa ACOR, que quiso, en primer lugar destacar, la mejora productiva que ha ido llevando el sector en los últimos años hasta alcanzar una producción por hectárea de azúcar que supera las 15 toneladas, “muy por encima de los datos que ofrecen los productores por antonomasia de la UE, nuestros vecinos franceses. Hemos pasado de las 34 toneladas por hectárea de remolacha que se recogían en 1971 a las más de 100 que se alcanzan en la actualidad. Tenemos capacidad para producir, lo hacemos muy bien y nuestro único diferencial negativo es el riego que nos complica la competitividad, no se puede olvidar que el 20% del coste total de la producción de la remolacha es el riego”.

Rico quiso destacar la estabilidad que vive el sector en España fruto de los acuerdos interprofesionales alcanzados que hacen que, por ejemplo, los socios de ACOR tengan un precio asegurado hasta 2020 de 42 euros por tonelada, “algo que nos diferencia de la situación que viven los ganaderos de leche”.

“El fin de las cuotas es un gran reto para todos los remolacheros, al que podemos hacer de frente. Es una oportunidad para hacer más rentable nuestra azucarera de Olmedo, logrando producir 200.000 toneladas de azúcar en campaña que superen los 120 días”, aseveró el presidente de la cooperativa ACOR, que destacó “las erráticas previsiones de la Comisión Europea durante la reforma de la OCM de 2006, especialmente sobre los precios del azúcar a nivel mundial y comunitario, pues no se puede olvidar que en las últimas semanas el valor del primero ha alcanzando los 471 euros mientras que en la UE era de 436 euros.

Nos llevaron a una reforma a la que no vimos sentido en su momento y que ahora lo tiene todavía menos, pero seguimos trabajando para que nuestros socios sean cada vez más efectivos en su trabajo con la remolacha y en este tema el ahorro energético es algo básico en lo que estamos poniendo mucho esfuerzo de concienciación”.

Financiación, semillas, fitosanitarios y ahorro energético

Estos tres fueron los ejes de la segunda mesa de análisis. Marcos Fraile, del Popular, destacó las posibilidades de financiación que en la actualidad se ofrecen a agricultores y ganaderos, apostando por la contratación de seguros como un elemento base de la mejora de la rentabilidad. Y, además, insistió en el nuevo medio de pago exclusivo para profesionales de la agricultura, la tarjeta Punto Agro que ofrece comodidad, flexibilidad y una gran cantidad de ventajas.

Gonzaga Hernández de KWS puso en valor el trabajo que se está realizando en la genética de la semilla de remolacha como elemento básico de la mejora de los rendimientos. “Cada año, sólo por la evolución de la semilla, se produce una mejora productiva del 2,5% y no se ve límite a ese dato”, declaró.

La evolución de los tratamientos fitosanitarios es básico para seguir trabajando en la mejora de la rentabilidad de los remolacheros, así lo ha afirmado Samuel Gil de Bayer que incidió en la necesidad de que estos se planifiquen de una [[{«fid»:»29738″,»view_mode»:»media_original»,»type»:»media»,»attributes»:{«height»:667,»width»:1000,»style»:»width: 500px; height: 334px; border-width: 6px; border-style: solid; margin: 6px; float: right;»,»class»:»media-element file-media-original»}}]]forma ordenado y en el horizonte de varias campañas, “es fundamental tener conciencia de que es necesaria una estrategia de manejo de las malas hierbas”, señaló.

Miguel Ángel Catalán, jefe de cultivos de ACOR, analizó las iniciativas que la cooperativa está llevando a cabo en la aplicación de nuevos recursos energéticos en las explotaciones buscando un ahorro en los gastos de las mismas, pues si el riego supone el 20-30% del gasto de la explotación de este el 70% es el gasto energético. “Los números son claros, con un mix energético que conjugue energía eólica, solar y la energía fósil se puede lograr un ahorro muy importante que pase de los 861 euros por hectárea a los 144 en un plazo de 14 años tras las amortizaciones”, subrayó

La PAC y la remolacha

Fernando Miranda, director general de Producciones y Mercados Agrarios del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, hizo un repaso de las tendencias en las que se va a mover la Política Agraria Comunitaria en los próximos años, pues “los debates sobre la nueva PAC no se abrirán hasta el verano del 2017”.

“Tenemos que trabajar más en la regulación de los mercados, manteniendo las redes de seguridad que existen en la actualidad, pero sobre todo tenemos que trabajar en mecanismos de prevención que nos avisen de la llegada de las crisis. La próxima PAC será una PAC más verde, en la que la agricultura tiene que hacer valer su importancia medio ambiental como sumidero de CO2 y estoy seguro que las Administraciones vamos a seguir apoyando a determinados sectores a través de las ayudas asociadas como es la remolacha”, destacó Miranda.

El responsable ministerial reiteró la necesidad de que la posición de los agricultores y ganaderos se refuerce con la creación de organizaciones profesionales, interprofesionales, etc.

Por su parte, Pedro Medina, director general de Política Agraria Comunitaria de la Junta de Castilla y León, quiso destacar la “organización histórica” que ha presidido el sector remolachera y la fuerza que esto le ha dado, “el sector remolachero debe ver el final de las cuotas como una oportunidad que ofrece dificultades pero de la que la profesionalidad de nuestros cultivadores va a ser la mejor herramienta para seguir avanzando y mejorando la rentabilidad”, apostando por que las “ayudas vayan hacia aquellos que generan beneficios y no sean percibidas por la historia agraria que el solicitante de la PAC arrastre”.

[[{«fid»:»29739″,»view_mode»:»media_original»,»type»:»media»,»attributes»:{«height»:667,»width»:1000,»style»:»width: 500px; height: 334px; border-width: 5px; border-style: solid; margin: 5px; float: left;»,»class»:»media-element file-media-original»}}]]Profesionalidad y organización

Eduardo Cabanillas, secretario de la Consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León fue el encargado de clausurar las jornadas destacando que se abre una nueva etapa para la remolacha sin las cuotas. “El sector remolachero no se va a asustar por esta nueva situación, es profesional y está bien organizado, ha salido reforzado de la reestructuración consecuencia de la reforma de la OCM de 2006, pero tiene, tenemos que seguir luchando contra el individualismo y contra esa distancia entre agricultores e industria, ambos tienen que ser aliados en el desarrollo y futuro del sector. La Junta de Castilla y León ha apostado y seguirá apostando por este cultivo como parte del futuro del campo de Castila y León”, concluyó.



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