El sector ganadero de las Illes Balears ha mostrado un apoyo unánime a la decisión del Govern balear de continuar con el programa de erradicación de la lengua azul . Esta postura refuerza la propuesta de la Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural , que, amparándose en el acuerdo del Comité RASVE , solicita mantener los requisitos para la entrada de animales en el territorio insular y continuar con las medidas de erradicación.
Un contexto nacional complejo
El pasado 9 de enero, el Comité RASVE aprobó un cambio en la estrategia nacional frente a la lengua azul. Este organismo, compuesto por representantes del Ministerio de Agricultura y de las comunidades autónomas, decidió adoptar un enfoque de protección en lugar de erradicación. Este cambio responde a una situación excepcional marcada por:
- Circulación simultánea de cuatro serotipos (1, 3, 4 y 8) en España.
- Una mayor actividad vectorial de mosquitos debido a condiciones climáticas inusuales durante otoño e invierno.
- Escasez de vacunas y dificultades logísticas para una vacunación masiva.
El nuevo programa implica que la vacunación será voluntaria y que no se impondrán restricciones al movimiento de los animales, salvo que presenten síntomas clínicos.
La excepción insular: Baleares mantiene su programa de erradicación
A pesar de este cambio a nivel nacional, el Comité RASVE permite a los territorios insulares, como las Illes Balears , continuar con su propio programa de erradicación. Esto incluye medidas específicas para controlar la entrada de animales al territorio insular, mientras que el movimiento hacia la península no estará sujeto a restricciones adicionales.
El director general de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de las Illes Balears, Fernando Fernández , explicó que el Govern consultó a todas las organizaciones agrarias, asociaciones de defensa sanitaria ganadera y los Consells Insulares sobre la continuidad del programa. La respuesta fue unánime: el sector apoya mantener la estrategia de erradicación.
Impacto económico y sanitario de abandonar la erradicación
Fernando Fernández destacó que abandonar la estrategia de erradicación podría tener graves consecuencias. “Podríamos convertir la lengua azul en una enfermedad endémica en nuestro país”, afirmó. Además, advirtió sobre el impacto en la exportación de ovino y bovino en vida, una actividad que depende en gran medida de la confianza internacional en el estatuto sanitario de España.
La insularidad de las Illes Balears representa una ventaja estratégica para erradicar la enfermedad. Según Fernández, “si seguimos trabajando como hasta ahora, podemos lograrlo. El sector ganadero lo tiene claro: desean erradicar la enfermedad”.
Refuerzo de las acciones de vigilancia y vacunación
Ante el cambio de estrategia nacional, el Gobierno balear ha anunciado un refuerzo en las acciones de vigilancia pasiva para detectar precozmente otros serotipos. Las medidas incluyen:
- Incrementar las muestras en explotaciones centinelas.
- Contratar 100.000 dosis de la vacuna contra el serotipo 3 de lengua azul.
- Asegurar las dosis necesarias para vacunar al ganado frente a la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE).
Estas serán aprobadas el próximo 30 de enero en el Consejo de Administración del Instituto de Investigación y Formación Agroalimentaria y Pesquera de las Illes Balears (IRFAP) .
Un consenso necesario para proteger la ganadería balear
El respaldo unánime del sector ganadero de las Illes Balears refuerza la posición del Govern en el Comité RASVE. La Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural comunicará al Ministerio de Agricultura la intención de mantener su programa de erradicación, destacando la importancia de estas medidas para garantizar la seguridad sanitaria y proteger la exportación ganadera .
El director general Fernández concluyó agradeciendo la sensibilidad del Ministerio hacia las circunstancias de insularidad y el apoyo del sector, subrayando que “es fundamental tomar decisiones basadas en la experiencia acumulada y no en momentos de crisis”.
