El consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez Quiñones, ha presidido la constitución de la Mesa del Lobo de Castilla y León, el segundo órgano de interlocución social que incluye el Plan de Gestión del Lobo, junto con la Mesa Científica que se reunió por primera vez el pasado 5 de septiembre.
«En esta mesa del lobo, afirmaba Suárez Quiñones a los medios de comunicación, estarán presentes las organizaciones agrarias, grupos conservacionistas, cazadores e incluso el sector turístico que tenga el lobo como eje de su actividad.»
La situación del lobo en 2016 con temas como la conservación de la especies, los ataques declarados, las compensaciones que se han llevado a cabo.. han centrado este primer encuentro, junto con las labores que ya se han realizado en 2017, las que se llevaran a cabo en lo que queda de año así como las previsiones para 2018.
DATOS
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En 2016 se han declarado 1.910 ataques afectando a 1.605 cabezas de ganado mayor y 1.881 de menor.
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Crece un 23% los ataques en relación a 2015 cuando fueron 1.463
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En Ávila, el número de ataques casi se duplica pasando de 489 a 811
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En 2016, en seis provincias casi alcanzan los 200 ataques, 268 en Segovia, 197 en Zamora, 194 en León, 183 en Salamanca y 180 en Palencia
El Consejero de Fomento ha pedido «sensatez» a todas las partes en un tema tan delicado como es este del lobo, especialmente en el sur del Duero donde la situación es más complicada pero sin olvidar lo que pasa al Norte del río, «el lobo se ha expandido por zonas de Ávila, Salamanca, Segovia o el sur de Zamora donde hace muchos años que no se veía… lo que está provocando conflictos que, entre todos tenemos que devolver».
Suárez Quiñones ha destacado como los ataques, en el primer semestre de 2017, han bajado en el sur del Duero, especialmente en provincias como Zamora o Salamanca, pero, «por el contrario, han aumentado en Ávila, menos que en la campaña previa pero siguen aumentando, una provincia en la que la ganadería extensiva tienen una importancia vital para la economía de nuestro medio rural. No podemos permitir que los ganaderos tengan que abandonar la actividad por las incursiones de estos animales»
Además, recordó como en octubre se va a producir una visita de distintos funcionarios de la Comisión Europea pues «queremos tener la seguridad jurídica de todas las medidas que tomemos en este tema, especialmente en lo que se refiere a los controles del censo del lobo en zonas donde la situación es más acuciante como en Ávila»