La Junta de Castilla y León alerta del peligro de la entrada de la avispilla del castaño en la región.
El Gobierno autonómico recomienda a los propietarios que revisen sus plantaciones recientes y en caso de detectar algún síntoma de la plaga lo comuniquen a los agentes forestales de su zona o al Servicio Territorial de Medio Ambiente. La forma más probable de entrada de este insecto es a través de plantas procedentes de viveros de zonas contaminadas.
Partidas procedentes de un vivero gallego contaminado por la avispilla se han distribuido recientemente por distintas comunidades autónomas, entre ellas Extremadura y Castilla y León. Desde la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, se ha procedido a la eliminación de parte del lote posiblemente contaminado. También se están realizando las correspondientes inspecciones y seguimientos tanto en viveros como en repoblaciones realizadas recientemente (2014-2015), para intentar que ninguna planta contaminada se instale en las masas forestales de castaños.
La avispilla del castaño Dryocosmus kuriphilus se puede considerar el insecto más dañino para estos árboles, anulando totalmente la producción de castaña. Actualmente, se encuentra en España en masas y en algunos viveros de la Cornisa Cantábrica, Galicia, Cataluña y Málaga, así como en el norte de Portugal.
La Junta destaca que es fundamental el apoyo de los productores de castaña y recomienda que los propietarios revisen inmediatamente las repoblaciones realizadas durante 2014 y 2015. En el caso de detectar síntomas de la plaga, deben avisar al Servicio Territorial de Medio Ambiente o a los agentes medioambientales de su zona. Posteriormente, deben proceder a la destrucción de todas aquellas plantas contaminadas, según las instrucciones que reciban.
Se recomienda también que, aunque no aparezcan síntomas de la avispilla, en aquellas repoblaciones con plantas procedentes de zonas contaminadas se realice un recepado preventivo dejando una o dos yemas, y quemando los restos de la planta podada. En este sentido, se hará una revisión de las plantaciones de forma periódica durante este año y el próximo para evitar la entrada del organismo.
En el caso de realizar nuevas plantaciones de castaño, la Junta recomienda que se lleve a cabo con plantas procedentes de zonas no contaminadas, evitando de esta forma la compra para la repoblación de plantas procedentes de zonas contaminadas o sospechosas de estarlo.