El producto insigne de la comarca zamorana de La Guareña, el garbanzo de Fuentesaúco, ha obtenido recientemente la calificación de “excelente” en una cata realizada por un grupo de expertos entre los que se encontraban productores, envasadores, representantes de asociaciones, expertos en nutrición y algún investigador.
La última cosecha, la de 2014, perteneciente a la Indicación Geográfica Protegida del Garbanzo de Fuentesaúco lucha por consolidar la semilla autóctona Ecotipo Garbanzo de Fuentesaúco y parece ser que lo ha conseguido con la excelente calidad obtenida en el producto, al menos así lo ha reconocido a Agronews Castilla y León el Director Técnico de la IGP, Nicolás Armenteros, al señalar que se ha conseguido “el garbanzo casi perfecto”.
[[{«fid»:»17092″,»view_mode»:»media_original»,»type»:»media»,»attributes»:{«height»:1944,»width»:2592,»style»:»width: 400px; height: 300px; border-width: 3px; border-style: solid; margin: 5px; float: left;»,»class»:»media-element file-media-original»}}]]Después de 12 años de Indicación Geográfica Protegida el uso de la semilla autóctona ha dado como resultado en la campaña pasada un “calidad que hasta ahora no se había conseguido en esta legumbre”, ha asegurado Armenteros, “no solo la calidad sino también la uniformidad del producto ha sorprendido a los expertos que han valorado y le han dado 90 puntos sobre cien en las últimas catas”.
Precisamente los catadores prueban las muestras que los veedores del Consejo Regulador toman de las industrias y de las partidas que salen al mercado. Las pruebas se hacen primero con la legumbre al natural, sin cocinar, valorándose parámetros como el estado de la semilla, el calibre o el color.
Los productores del Consejo Regulador utilizan ya desde hace dos años semilla certificada cien por cien, una decisión controvertida que ha costado trasladar a los cultivadores.
El garbanzo de Fuentesaúco se caracteriza por su cremosidad y su sabor exquisito, “es cierto, dice Nicolás Armenteros, que necesita más tiempo de cocción que otro garbanzo normal pero el resultado es espectacular y delicioso”. Reconoce Armenteros que hay tres parámetros esenciales para este producto: piel imperceptible, mantecosidad extrema y sabor característico. “El garbanzo de Fuentesaúco reúne las tres cualidades juntas convirtiéndolo en esta campaña en casi perfecto”, ha confirmado el Director Técnico de la IGP.
Por otra parte, en cuanto a la siembra de esta próxima campaña se ha incrementado el número de productores y hectáreas debido, asegura Nicolás Armenteros “a la subvención que ofrece la Diputación de Zamora y a la nueva PAC”. Mayoritariamente se ha sembrado ya el 98 por ciento de las tierras y hasta el próximo mes de mayo no se abre el plazo de inscripción de las parcelas.
La última campaña del garbanzo en la Indicación Geográfica Protegida que fue la del año 2014 dio una rentabilidad de 753 kilogramos por hectárea, se sembraron alrededor de 454 hectáreas de 44 productores de la comarca de La Guareña. La IGP ha comercializado desde el pasado 1 de octubre hasta el pasado 20 de marzo unas 67 toneladas de garbanzo de Fuentesaúco.