El pleno del Ayuntamiento de Picassent aprobó en su última sesión, celebrada el pasado 26 de julio, la puesta en marcha de un dron para evitar los robos en el campo. Dada la amplia extensión del término de Picassent, de cerca de 90 kilómetros cuadrados, el concejal de Seguridad Ciudadana, Salva Morató, destacó su utilidad para poder hacer frente a la gran cantidad de robos que se producen a los cultivos y a las casetas.
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El dron tiene un precio de 15.000 euros, a los que hay que añadir los 12.000 euros del contrato con la Universitat Politècnica de València, que tiene como objetivo desarrollar la legislación actual, sobre todo en cuanto al área de influencia del aeropuerto de Manises. Además, también hay que determinar por donde se puede volar y por donde se puede grabar, puesto que las grabaciones por ahora son consideradas como pruebas en un hipotético juicio a raíz de la comisión de una falta o de un delito.
Morató destaca que los pilotos ya están formados, se han hecho las pruebas preceptivas y, en el plazo de un mes pueden estar en funcionamiento por el término. Respecto a su importe, el concejal subraya que en menos de un año, dada la gran cantidad de robos en el campo, la puesta en marcha del dron estará amortizada, si además tenemos en cuenta el ahorro de efectivos. Del mismo modo, Morató destaca el carácter pionero de la medida, puesto que Picassent es uno de la decena de pueblos valencianos donde ya funciona este sistema para colaborar en materia de seguridad ciudadana.
