El sector vitivinícola madrileño, liderado por UPA Madrid y UGAMA (Unión de Agricultores, Ganaderos y Silvicultores de Madrid), ha alzado la voz en contra del proceso electoral para la renovación del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Vinos de Madrid. Las elecciones, convocadas para el 26 de agosto de 2024, han generado un fuerte descontento en la comunidad de viticultores y bodegas de la región, quienes denuncian la falta de transparencia y la ausencia de un verdadero proceso democrático.
Un proceso electoral cuestionado
El 6 de agosto de 2024, apenas 20 días antes de la fecha establecida para las elecciones, se hizo pública la convocatoria para la renovación de los vocales del Consejo Regulador de la DOP Vinos de Madrid. Sin embargo, esta convocatoria ha sido recibida con gran escepticismo y preocupación por parte de importantes sectores del mundo vitivinícola madrileño.
La principal crítica se centra en la opacidad del proceso electoral, que ha dejado fuera a una parte significativa de los viticultores y bodegas independientes. Según UPA Madrid y UGAMA, el censo electoral, especialmente el Censo B que representa a los viticultores independientes, está desactualizado y adulterado. Se estima que más del 50% de los viticultores inscritos en este censo han dejado la actividad o incluso han fallecido, lo que plantea serias dudas sobre la legitimidad de las elecciones.
Además, el hecho de que las elecciones se celebren el 26 de agosto, cuando el sector ya ha comenzado la vendimia, es visto como un intento de desincentivar la participación. Para muchos, esta fecha parece estratégicamente seleccionada para reducir la posibilidad de que los viticultores acudan a votar.
Candidaturas desestimadas y descontento generalizado
Otra de las grandes preocupaciones del sector es la desestimación de todas las candidaturas no oficiales presentadas para los diferentes censos. Este hecho ha generado un profundo malestar entre las bodegas y viticultores, algunos de los cuales han optado por abandonar la DOP Vinos de Madrid en señal de protesta.
El descontento ha llegado al punto en que varios actores clave del sector han decidido no acudir a las urnas, considerando que el proceso no ofrece garantías de una elección justa y representativa. Esto pone en evidencia el nivel de insatisfacción y desconfianza que prevalece en la comunidad vitivinícola de Madrid.
La intervención de la Administración en el proceso electoral
La participación de la Administración en el proceso electoral ha sido otro de los puntos de mayor controversia. La Comunidad de Madrid ha tomado un papel activo en la organización de las elecciones, llegando incluso a proponer como presidente del Consejo Regulador a un vocal que no forma parte de ninguna candidatura y que no estará sujeto a la elección del sector.
Este hecho ha generado críticas generalizadas, ya que convierte al Consejo Regulador de la DOP Vinos de Madrid en el único en toda España en el que la Administración tiene voz y voto, lo que para muchos es un claro indicio de una gestión centralizada y poco democrática. La intervención directa del gobierno regional en un órgano que debería ser autónomo y representativo del sector es vista como una grave distorsión del proceso democrático.
La crisis del sector vitivinícola en Madrid
El contexto en el que se celebran estas elecciones no es menos preocupante. Desde la creación de la DOP Vinos de Madrid, la producción de uva en la región ha caído en más del 80%, mientras que la cantidad de botellas elaboradas ha disminuido en un 50%. Estas cifras reflejan una gestión deficiente por parte del Consejo Regulador, lo que agrava aún más el descontento del sector.
La crisis en la producción vitivinícola madrileña es un síntoma de problemas más profundos en la gestión y promoción de los vinos de Madrid. A pesar de contar con un patrimonio vitivinícola histórico y un mercado potencial en la capital, la región ha visto un descenso continuo en su producción, lo que podría poner en peligro la supervivencia de muchas bodegas y viñedos.
Exigencias de UPA Madrid y UGAMA
Ante esta situación, UPA Madrid y UGAMA han exigido la anulación de la convocatoria electoral actual y la puesta en marcha de un nuevo proceso, que sea transparente y verdaderamente democrático. Ambas organizaciones consideran que solo un proceso electoral justo, en el que todos los actores del sector puedan participar, podrá garantizar el futuro de los vinos de Madrid.
La exigencia de UPA Madrid y UGAMA no es solo una demanda de cambio en la gestión del Consejo Regulador, sino una llamada a la protección y revitalización del sector vitivinícola madrileño. Estas organizaciones subrayan la necesidad de un Consejo que realmente represente los intereses de todos los viticultores y bodegas, y que trabaje activamente por el desarrollo y promoción de los vinos de Madrid, tanto a nivel nacional como internacional.
El sector vitivinícola madrileño se enfrenta a un momento crucial. Las elecciones para la renovación del Consejo Regulador de la DOP Vinos de Madrid, tal como están planteadas, han generado un fuerte rechazo entre los principales actores del sector. La falta de transparencia, la desactualización del censo y la intervención de la Administración en el proceso son señales preocupantes de un sistema que necesita una reforma profunda.
La respuesta de UPA Madrid y UGAMA es clara: se debe anular el proceso electoral actual y convocar nuevas elecciones que sean justas, democráticas y representativas. Solo así se podrá restaurar la confianza en el Consejo Regulador y asegurar un futuro próspero para los vinos de Madrid.
