El mercado mundial del limón, advierten desde ASAJA Málaga, enfrenta un año complicado debido a una serie de factores que han afectado la producción y la exportación desde el hemisferio sur, especialmente en países clave como Sudáfrica, Argentina y España. Las condiciones meteorológicas adversas, junto con problemas fitosanitarios y una crisis en la gestión del agua, han desencadenado una reducción significativa en las cosechas de estos países.
Sudáfrica y Argentina, los mayores afectados en el hemisferio sur
En el hemisferio sur, los países de Sudáfrica y Argentina son dos de los principales exportadores de limón. Ambos han sufrido un descenso en la producción debido a factores climáticos adversos. La campaña sudafricana de limones ha sido revisada a la baja varias veces, pasando de una estimación inicial de 37,9 millones de cajas de 15 kg a 33,9 millones de cajas. Esto supone una reducción significativa en comparación con los 35,6 millones de cajas exportadas en el año anterior.
Las fuertes lluvias y el viento han sido los principales responsables de esta disminución en la producción sudafricana. A medida que la temporada de limones en Sudáfrica llega a su fin, los agricultores enfrentan un futuro incierto, con pérdidas que afectan tanto la exportación a mercados clave como Europa como el abastecimiento interno.
Argentina y la crisis fitosanitaria
En Argentina, la situación es aún más crítica. Las lluvias intensas y un fuerte impacto de enfermedades fitosanitarias han causado una disminución considerable en la producción y calidad del limón argentino. Hasta principios de julio, las exportaciones de esta fruta a Europa registraron una caída del 15% al 20% en comparación con el mismo período del año anterior, alcanzando solo 114.000 toneladas exportadas.
Uno de los factores determinantes en esta crisis ha sido el abandonamiento de más de 15.000 hectáreas de cítricos en Argentina debido a los altos costos de producción y las enfermedades. Además, los productores han enfrentado dificultades para enviar fruta de alta calidad a los mercados internacionales, especialmente a EE. UU., que es su principal mercado.
España también sufre una crisis en la producción de limón
En Europa, España, uno de los mayores productores de limón, también ha experimentado una caída en la producción debido a las condiciones climáticas desfavorables. En la región de Murcia, la mayor zona productora de limones del país, se espera un descenso del 20% en la variedad Fino y un 30% en la variedad Verna para la próxima campaña. Estas cifras preocupan a los agricultores españoles, ya que la campaña 2023/2024 resultó desastrosa para ellos, con precios muy por debajo de los costes de producción debido a un exceso de oferta.
En los últimos años, la superficie dedicada al cultivo de limones en España ha crecido en un 36%, pasando de 38.363 hectáreas a 52.119 hectáreas. Sin embargo, este crecimiento en la superficie no ha sido suficiente para contrarrestar el impacto de las condiciones meteorológicas adversas y los problemas en el suministro de agua de calidad para el riego.
Problemas en la calidad y el abastecimiento del producto español
Aparte de la disminución en la cantidad de producción, la calidad de este producto también ha sido afectada por la mala calidad del agua de riego y la incidencia de plagas y enfermedades en los cultivos. Esto ha provocado que muchos productores tengan dificultades para cumplir con los estándares de exportación, lo que ha generado una reducción en las ventas a los mercados internacionales.
Además, las exportaciones de limón de otros países del hemisferio sur, como Sudáfrica y Argentina, han incrementado la competencia en el mercado europeo, lo que ha ejercido una presión a la baja sobre los precios del limón español.
El caso de Egipto
En contraste con los problemas en Sudáfrica, Argentina y España, Egipto espera una campaña positiva para el mercado del limón. La temporada de este cítrico en Egipto comenzó en septiembre de 2024 y se estima que los volúmenes serán superiores a los del año pasado. Optimistas en el sector sugieren que el incremento podría ser de hasta un 25% gracias al aumento de la superficie cultivada.
Aunque los problemas logísticos, como la crisis del mar Rojo, han afectado al sector citrícola en su conjunto, los exportadores egipcios mantienen una visión positiva sobre el futuro de las exportaciones de limón. En la temporada pasada, que se extendió de septiembre de 2022 a junio de 2023, Egipto exportó 105.000 toneladas de este cítrico, y más de la mitad de este volumen se envió a Arabia Saudí, uno de los principales destinos.
Calidad y expectativas del limón egipcio
La variedad de limón Eureka domina la producción en Egipto, y los productores esperan que la calidad de los limones sea alta y equilibrada en cuanto a tamaño. Aunque las exportaciones de limón egipcio a Asia representaron solo el 10% de las ventas el año pasado, el mercado asiático sigue siendo un área de interés para los exportadores egipcios, ya que tiene el potencial de crecer significativamente en los próximos años.
Un mercado volátil y con retos para 2024 El mercado global del limón en 2024 enfrenta numerosos desafíos debido a las condiciones meteorológicas adversas, los problemas fitosanitarios y la competencia internacional. Países clave como Sudáfrica, Argentina y España han visto reducida su capacidad de producción y exportación, lo que ha provocado un aumento en la incertidumbre para los próximos años. A pesar de estos obstáculos, países como Egipto parecen ser una luz de esperanza, con una campaña en ascenso y un aumento en la superficie cultivada que podría compensar la caída de la oferta desde otros rincones del hemisferio sur.
