Personal de las Reservas Nacionales de Caza del Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural de la Generalitat de Cataluña se han desplazado temporalmente a Lleida con el objetivo de instalar cajas trampa de captura de conejos como medida excepcional para combatir los daños que producen sobre los cultivos agrícolas y los taludes de infraestructuras.
Los primeros equipos se desplazaron a Verdú la semana pasada, y ésta han actuado en zonas con altas densidades de conejos de las comarcas del Urgell y el Segrià, en los municipios de Verdú, Maldà, Tàrrega, Aitona, y Serós.
Las jaulas se colocan a la entrada de la madriguera en las zonas donde están las gazapos y sirven para actuar de manera más quirúrgica, principalmente en aquellas zonas donde los daños son más altos. Cabe recordar que el conejo ya puede cazarse todo el año, y estas medidas son complementarias de apoyo.
Para llevar a cabo estas actuaciones, se cuenta con el apoyo y colaboración de los titulares de estas Áreas Privadas de Caza y propietarios de fincas afectadas por los daños.
La instalación de estas jaulas se enmarca en el nuevo paquete de medidas con carácter de urgencia y de aplicación inmediata para controlar la sobrepoblación de conejo en la Plana de Lleida. Estas nuevas acciones, junto con las ya establecidas y las medidas de protección de los cultivos que implementan los propietarios de los terrenos, deben permitir reducir el número de daños.
Entre las nuevas medidas más destacadas figura equipos propios para capturar conejos, la declaración de la emergencia cinegética, el pago del chipaje de los hurones para la caza, y nuevos métodos de captura que empezaron a probarse la semana pasada al 'Estany d'Ivars y Vila-sana.