
La provincia de Ávila lidera las ayudas de la Junta de Castilla y León para la promoción de la cría de ejemplares de razas autóctonas con 504.000 euros
¿Qué busca esta iniciativa?
El objetivo principal de esta línea de subvenciones es la conservación del valioso patrimonio genético de las razas puras de Castilla y León. Estas ayudas compensan a los ganaderos que apuestan por ejemplares de razas autóctonas frente a las foráneas, fomentando los programas de mejora gestionados por asociaciones oficiales. Este compromiso asegura la preservación de especies clave en la biodiversidad y el desarrollo rural.
Ávila: Líder en apoyo a la ganadería autóctona
En la campaña 2025, Ávila ha destacado como la provincia que más ayudas ha recibido, con un presupuesto total de 504.786 euros distribuidos entre 175 explotaciones. Este monto representa el 29 % del total asignado en Castilla y León para esta línea de subvenciones.
Estos datos fueron presentados por el director general de Producción Agrícola y Ganadera, Rubén Serrano, durante su visita a la explotación del presidente de la Asociación de Ovino de Raza Ojalada, Óscar González, en La Horcajada. Serrano enfatizó el papel de estas ayudas en la promoción de la cría e inscripción de ejemplares en libros genealógicos, reforzando la relevancia de las razas autóctonas en la economía rural.
Las razas beneficiadas en Ávila
En Ávila, la raza Avileña Negra Ibérica, incluida su variedad Bociblanca, lidera el número de ejemplares beneficiados con 1.285 animales. Además, otras razas como el ovino Ojalado, seguido de la Castellana, y el equino Hispano-Bretón también han recibido apoyos significativos. Estas especies representan una parte vital del patrimonio genético y productivo de la provincia.
Distribución regional de las ayudas
A nivel de Castilla y León, 692 explotaciones ganaderas han recibido un total de 1,72 millones de euros en subvenciones. Después de Ávila, las provincias que han recibido más apoyos son Salamanca con el 25,4 % del presupuesto total, Zamora (12,8 %) y León (10,1 %).
Provincia | Beneficiarios | Subvenciones (%) | Importe Total (euros) |
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Ávila | 175 | 29 % | 504.786 |
Salamanca | 175 | 25,4 % | 437.872 |
Zamora | 89 | 12,8 % | 220.736 |
León | 70 | 10,1 % | 173.872 |
Otras | 183 | 22,7 % | 382.734 |
Total | 692 | 100 % | 1.720.000 |
El valor de las razas autóctonas
Las razas autóctonas de Castilla y León destacan por su excelente adaptación al medio, lo que las hace ideales para un manejo sostenible de los recursos naturales. Además, juegan un papel clave en:
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Mantenimiento de la biodiversidad.
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Fijación de población en zonas rurales.
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Producción de alimentos de alta calidad con características organolépticas sobresalientes.
Subvenciones y su distribución
La Junta de Castilla y León ha establecido un esquema de ayudas dividido según el tipo de ganado. Por ejemplo:
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360 euros por unidad de ganado mayor en razas amenazadas de bovino como Alistana-Sanabresa, Sayaguesa o Avileña Negra Ibérica.
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240 euros por unidad para razas de ovino como la Castellana y la Churra.
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18 euros por ejemplar aviar de razas como la Gallina Castellana Negra.
Desde que esta iniciativa comenzó en 2019, con un presupuesto inicial de 850.000 euros, ha crecido significativamente gracias al interés de los ganaderos y el respaldo institucional. Este aumento refleja la creciente importancia de proteger y promover el uso de razas autóctonas.
Colaboración con asociaciones ganaderas
La gestión de estas ayudas está en manos de las asociaciones oficialmente reconocidas, quienes desempeñan un papel crucial en los programas de mejora y la inscripción en libros genealógicos. Este trabajo conjunto asegura:
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Incrementar los censos ganaderos.
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Mejorar la calidad genética de los ejemplares.
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Promover un uso sostenible de los recursos naturales en zonas rurales.
Impacto y futuro de las ayudas
El director general Rubén Serrano destacó la importancia de mantener esta línea de subvenciones para garantizar el futuro de las razas autóctonas y su impacto en la economía rural. Además, subrayó que este tipo de iniciativas contribuyen no solo al desarrollo agrario, sino también a la lucha contra la despoblación en Castilla y León.
Con un enfoque en la sostenibilidad, la biodiversidad y la producción de calidad, estas ayudas son un claro ejemplo de cómo el trabajo coordinado entre administraciones y ganaderos puede generar beneficios económicos, sociales y medioambientales.