
ASAJA de Castilla y León lamenta que en la última ronda de negociaciones de la Conferencia de la Organización Mundial del Comercio (OMC) se haya “pasado por alto” el principio de reciprocidad en el mercado internacional, es decir, que el país exportador tenga que cumplir los mismos requisitos respecto a la seguridad alimentaría, la protección del medio ambiente y el bienestar animal, que se exige en los países receptores a sus agricultores y ganaderos.
Este punto es una ya antigua demanda de esta Organización, puesto que las normas marcados por Bruselas son cumplidos por los agricultores y ganaderos de la Unión Europea mientras se abre la frontera a importaciones de países terceros a los que no se exige ninguna de esas garantías de calidad y seguridad, lo que implica una competencia desleal y además con frecuencia un engaño al consumidor.
ASAJA destaca en un comunicado de prensa que es la primera vez que la OMC no ha puesto en cuestión las ayudas agrarias de la Unión Europea.