En un contexto de crecientes tensiones entre ganaderos y defensores de la fauna silvestre, ASAJA ha tomado la iniciativa de representar los intereses de los productores en Bruselas. La organización agraria ha desplazado a una delegación de líderes y expertos al simposio previo a la votación clave del Convenio de Berna , donde se debatirá el cambio de estatus del lobo en Europa. Este cambio podría significar un punto de inflexión en la gestión de esta especie y su coexistencia con la ganadería.
La votación, programada para mañana, busca determinar si el lobo pasará de estar catalogado como una “especie de fauna estrictamente protegida” a una “especie de fauna protegida” , permitiendo mayor flexibilidad en su control y manejo en áreas rurales.
Castilla y León, epicentro del conflicto
La delegación de ASAJA está encabezada por Pablo Rincón , gerente de ASAJA-Segovia, quien subraya la grave situación en Castilla y León , la comunidad autónoma con el mayor censo de lobos en España. Según datos oficiales, Castilla y León alberga cerca del 60% de los lobos del país y registra anualmente alrededor de 5.500 ataques de lobos al ganado .
El impacto en la ganadería es significativo: pérdidas económicas, estrés en los animales, abortos tras los ataques y un daño irreparable en las explotaciones rurales. En la última década, la población de lobos en Europa ha pasado de 11.193 ejemplares en 2012 a 20.300 en 2023 , un crecimiento que pone en jaque la sostenibilidad de las actividades ganaderas tradicionales.
El simposio en Bruselas: expertos y legisladores en acción
El evento en Bruselas ha reunido a representantes de sectores clave, incluidos expertos en fauna, legisladores europeos y portavoces del sector ganadero . Entre los participantes destacan Juan Carlos Suárez-Quiñones , consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de Castilla y León, y una delegación de ASAJA compuesta por:
- Pablo Rincón (Segovia)
- Geli González , secretaria general de ASAJA Asturias.
- Francisco Bello , presidente de ASAJA Galicia.
- José María Castilla , responsable de ASAJA en Bruselas.
El simposio tiene como objetivo analizar las implicaciones económicas y sociales del aumento del censo lobero y las posibles soluciones para equilibrar la protección de la fauna con los intereses de las comunidades rurales.
El Convenio de Berna y el futuro del lobo en Europa
El Convenio de Berna , que regula la conservación de especies y hábitats, juega un papel fundamental en la protección del lobo en Europa. La propuesta de la Unión Europea para rebajar el nivel de protección del lobo responde a los cambios en su situación poblacional y los conflictos generados por su recuperación.
- En la UE, se estima que los lobos matan al menos 65.500 cabezas de ganado anualmente .
- En Castilla y León, esta cifra alcanza las 5.500 cabezas , lo que pone en evidencia la magnitud del problema.
ASAJA, junto a COPA-COGECA , ha solicitado que cualquier modificación en el estatus del lobo contemple medidas específicas para compensar las pérdidas de los ganaderos. Entre las demandas destacan:
- Indemnizaciones por abortos en ganado tras ataques.
- Compensaciones por pérdida de producción en carne o leche.
- Ayudas por lucro cesante derivado de los ataques.
Un esfuerzo coordinado para proteger a los ganaderos
ASAJA ha reforzado su estrategia con un enfoque en Bruselas, donde su oficina trabaja bajo el paraguas de COPA-COGECA , la organización que agrupa a los agricultores europeos. José María Castilla , representante de ASAJA en Bruselas, ha destacado la importancia de llevar las demandas de los ganaderos a las instituciones europeas, ya que estos son responsables de establecer un marco normativo homogéneo para todos los Estados Miembros.
El impacto de la votación en el Convenio de Berna
Para que la propuesta de cambio en el estatus del lobo sea aprobada, se requiere el voto favorable de dos tercios de las partes contratantes del Convenio de Berna. Una vez aprobada, la enmienda entraría en vigor tres meses después , aunque su aplicación en la Unión Europea dependerá de su incorporación al marco legislativo comunitario.
ASAJA insiste en que el cambio de estatus es una oportunidad para equilibrar la conservación de la fauna con la protección de la ganadería . La recuperación del lobo, si bien es un logro de conservación, no debe poner en riesgo el sustento de millas de familias rurales.
El debate sobre el lobo en Europa refleja un conflicto entre la conservación ambiental y la sostenibilidad de las actividades rurales . ASAJA defiende que es posible encontrar un modelo que permita la coexistencia del lobo y la ganadería , pero esto requiere medidas claras, apoyo financiero y una legislación que contemple las realidades del mundo rural.
La votación de mañana en el Comité Permanente del Convenio de Berna será decisiva para definir el futuro del lobo en Europa y, por fin, el de millas de ganaderos que enfrentan este desafío diariamente.