
La recolección del arroz en Andalucía llega a su fin esta semana, tras una campaña marcada por varios factores distintivos como la siembra tardía, el aumento de la superficie cultivada, la predominancia de las variedades de grano largo (79%) frente al grano redondo (21%), y la incidencia de las lluvias durante el periodo de cosecha. Este artículo ofrece un análisis detallado de la situación actual, cifras clave y los desafíos enfrentados por los agricultores en esta campaña.
Superficie cultivada y variedades predominantes
En la campaña 2024, según los datos de la Red de Alerta e Información Fitosanitaria, la superficie de arroz en Andalucía ha experimentado un incremento notable respecto al año anterior. Según datos oficiales, se han sembrado 22.650 hectáreas en la provincia de Sevilla y 600 hectáreas en Cádiz, con la inclusión de 20 variedades diferentes. Este aumento refleja la apuesta de los agricultores por el cultivo del arroz, pese a los retos que han enfrentado este año.
Predominio del grano largo
El grano largo ha sido la variedad más sembrada, representando el 79% de la superficie cultivada, en comparación con el 21% del grano redondo. Este cambio responde a las tendencias de mercado, que favorecen las variedades de grano largo por su alta demanda tanto en el ámbito nacional como internacional.
Impacto de la siembra tardía
La siembra del arroz en 2024 comenzó más tarde de lo habitual, lo que retrasó todo el ciclo productivo. Este retraso se debió principalmente a las condiciones climáticas y la planificación de las tareas agrícolas.
La recolección en Sevilla arrancó a principios de octubre, mientras que en Cádiz comenzó a finales de ese mismo mes. Sin embargo, la lluvia registrada desde el 10-11 de octubre ha dificultado el acceso de las máquinas cosechadoras y de los camiones a las parcelas. Este retraso ha impactado especialmente en el avance de la recolección, ya que la humedad del grano superó los niveles óptimos para su cosecha, afectando tanto al proceso como a la calidad final del producto.
Problemas adicionales: encamado del cultivo
El encamado del arroz, un fenómeno donde las plantas caen al suelo debido al viento, la lluvia o problemas estructurales, ha sido un desafío importante este año. Este problema ralentiza las operaciones de cosecha, obligando a las cosechadoras a avanzar a menor velocidad y generando mayores costos operativos para los agricultores.
Producción: diferencias entre márgenes del río
Aunque aún es pronto para disponer de cifras definitivas, los datos preliminares muestran una clara diferencia entre las producciones de la margen izquierda y la margen derecha del río Guadalquivir en Sevilla.
- Margen izquierda: Las producciones han sido, en general, buenas, reflejando un año favorable para esta zona.
- Margen derecha: Las producciones han bajado significativamente respecto a los niveles habituales. Esto se atribuye a factores como:
- Elevada salinidad del suelo, que afecta negativamente al crecimiento del cultivo.
- Siembra tardía, fuera del periodo óptimo para las condiciones de esta zona.
Labores post-recolección y manejo del terreno
Una vez finalizada la recolección, los agricultores deben realizar varias tareas importantes para preparar el terreno para el próximo ciclo:
Fangueo
El fangueo es una práctica esencial que se realiza entre una semana y un mes después de la cosecha. Consiste en incorporar los restos de la cosecha al suelo, mejorando su fertilidad y reduciendo la necesidad de fertilizantes químicos.
Inundación en mosaico
Como parte de las ayudas agroambientales al cultivo del arroz, los agricultores están obligados a inundar al menos un tercio de la superficie comprometida hasta el 15 de diciembre. Esta práctica beneficia no solo al control de malas hierbas, sino también al mantenimiento de los ecosistemas agrarios, que son vitales para las poblaciones de aves que habitan en los arrozales andaluces.
Medidas excepcionales por la sequía
La campaña 2024 también ha estado marcada por la sequía, que ha afectado tanto al desarrollo del cultivo como al cumplimiento de ciertos compromisos agroambientales. En respuesta a esta situación, la Dirección General de Ayudas Directas y de Mercados emitió la Resolución de 7 de octubre de 2024, que establece medidas excepcionales, incluyendo:
- Modificación de la superficie de inundación invernal.
- Cambios en la nivelación láser del terreno.
- Ajustes en los cultivos herbáceos válidos no elegibles.
Estas medidas buscan flexibilizar las condiciones para los agricultores, permitiendo que puedan cumplir con los requisitos necesarios para acceder a las ayudas agroambientales sin penalizaciones.
Perspectivas para la próxima campaña
De cara al futuro, el sector del arroz en Andalucía enfrenta varios desafíos, entre los que destacan:
- Control de la salinidad: Especialmente en las zonas más afectadas de la margen derecha del Guadalquivir.
- Adaptación a las condiciones climáticas: Con siembras en fechas óptimas para evitar los problemas asociados a los ciclos tardíos.
- Estrategias de sostenibilidad: La incorporación de prácticas como el fangueo y la inundación invernal seguirá siendo clave para mantener la productividad y los beneficios medioambientales.
La campaña de arroz 2024 en Andalucía ha sido un reflejo de la resiliencia de los agricultores frente a las adversidades climáticas y logísticas. Con 22.650 hectáreas cultivadas en Sevilla y 600 hectáreas en Cádiz, el sector ha logrado adaptarse a las condiciones difíciles, aunque las diferencias de producción entre las márgenes del Guadalquivir ponen de manifiesto la necesidad de una planificación más estratégica. Las ayudas agroambientales y las medidas excepcionales establecidas por la Administración Pública serán cruciales para garantizar la sostenibilidad del cultivo en futuras campañas