Arranca la segunda edición del curso de verano Agricool con la innovación, la formación y la comunicación como ejes centrales

José Ignacio Falces

9 de julio de 2018

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El Viceconsejero de Desarrollo Rural, Jorge Llorente, ha sido el encargado de inaugurar la segunda edición del curso de verano «Agricool» que organiza la Consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León bajo el título «El sector agroalimentario como motor económico: construyendo reputación» que girará sobre temas fundamentales: la innovación, la formación y la información.

[[{«fid»:»41131″,»view_mode»:»media_original»,»type»:»media»,»attributes»:{«height»:2022,»width»:3670,»style»:»width: 400px; height: 220px; border-width: 5px; border-style: solid; margin: 5px; float: left;»,»class»:»media-element file-media-original»}}]]Llorente ha querido destacar como la industria agroalimentaria es la primera de Castilla y León, «en dura pugna con la automoción», con un valor que supera los 10.000 millones de euros, una exportación que supera los 2.000 millones, más de 35.000 empleos…

«Además, contribuye a vehicular el potencial del sector primario, siendo la salida natural de sus producciones, asegurándolas un valor añadido que mejora la rentabilidad de las explotaciones». «Nuestra industria agrolimentatia está contribuyendo de forma clara a fijar población en el medio rural hasta el punto que el 60% del empleo que se crea con las nuevas inversiones industriales se concentra en esas zonas»

La reputación del sector agrialimentario, aseguró el Director General de Desarrollo Rural, se ha construído sobre la base de la calidad que ofrece y de la satisfacción de lo que reclama el consumidor. «La seguridad alimentaria es la que ha construído esa calidad… calidad organolética en un principio pero que cada vez más se completa con otras variantes como la protección del medio ambiente, el respeto de las situaciones laborales…»

Cerrando su intervención Jorge Llorente hablando de la importancia de la comunicación, señalando la aparente ruptura que se ha producido en los últimos años entre el sector urbano y el rural, «unión que, entre todos tenemos que recuperar, enseñando como se producen esos alimentos, las caras que están detrás de ellos, los niveles de calidad y seguridad alimentaria que cumplen…»



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