
Agroseguro ha anunciado el avance en el pago de indemnizaciones a los productores de frutales afectados por los siniestros registrados durante la campaña actual. Hasta el momento, la aseguradora ha abonado ya 64 millones de euros en compensaciones, con una previsión de superar los 90 millones cuando se completen las evaluaciones de daños pendientes en producciones tardías.
El año 2024 ha sido especialmente complejo para los fruticultores españoles, quienes han sufrido los embates de condiciones climáticas adversas, destacándose las tormentas de pedrisco, que provocaron la mayor parte de los daños entre los meses de mayo y agosto. Estos fenómenos atmosféricos afectaron a más de 16.000 hectáreas de cultivos, generando unas pérdidas que han llevado a Agroseguro a destinar más de 60 millones de euros en indemnizaciones solo por estos siniestros. Además, otros 23 millones de euros han sido asignados para compensar las pérdidas ocasionadas por heladas y el mal cuajado de los frutos, así como por otros riesgos cubiertos, como lluvias, inundaciones, vientos y daños por fauna.
Las inclemencias meteorológicas que afectaron a la agricultura española este año se tradujeron en más de 30.000 hectáreas aseguradas de frutales con siniestros. Las tormentas de pedrisco fueron las más devastadoras, afectando a una gran parte de las producciones y, en muchos casos, destruyendo cosechas completas. Estos daños se concentraron en distintas zonas del país, con comunidades como Murcia, Cataluña y Extremadura entre las más afectadas.
En concreto, la Región de Murcia ha sido la más golpeada por los fenómenos climáticos adversos, con más de 29 millones de euros ya abonados a los agricultores de la región. Esta cifra podría llegar a los 35 millones al cierre de la campaña, debido a los daños causados por las tormentas de pedrisco, especialmente las que azotaron la región en junio. Los cultivos de melocotón y albaricoque han sido los más afectados, con importantes daños también en la madera de los árboles, especialmente en las zonas de Ojos y otros municipios cercanos.
Por otro lado, en Cataluña, las heladas de abril y las tormentas de pedrisco registradas en julio y agosto han generado unas pérdidas considerables. Las indemnizaciones en esta comunidad alcanzarán los 17 millones de euros, principalmente para los productores de melocotón, manzana y pera de la provincia de Lleida, una de las principales zonas frutícolas del país. A pesar de las grandes pérdidas, más de la mitad de las indemnizaciones ya han sido pagadas a los agricultores catalanes.
Extremadura también ha sido una de las regiones más perjudicadas, con daños que superarán los 16 millones de euros, principalmente en cultivos de ciruela y melocotón. Las condiciones meteorológicas inestables de la primavera, con frecuentes heladas y cambios abruptos en el clima, causaron grandes estragos en la producción frutícola de la región. Al igual que en Cataluña, más de la mitad de las compensaciones ya se han abonado a los agricultores extremeños.
Compensaciones por comunidad autónoma de Agroseguro
El impacto de las condiciones meteorológicas adversas se ha sentido en muchas otras regiones de España. En Aragón, por ejemplo, Agroseguro ya ha pagado más de 6,2 millones de euros en indemnizaciones, con una previsión de alcanzar los 10 millones antes de que finalice la campaña. Los daños más importantes en esta comunidad se registraron en las provincias de Zaragoza y Huesca, donde las tormentas de pedrisco de finales de junio y principios de julio causaron graves daños a los cultivos frutales.
Castilla-La Mancha es otra de las comunidades que ha sufrido importantes pérdidas en su producción frutícola. Agroseguro ha destinado hasta la fecha 6,5 millones de euros en indemnizaciones a los agricultores de esta región. La Rioja y Navarra, por su parte, han recibido indemnizaciones de 3 y 2 millones de euros, respectivamente. En ambas comunidades, las tormentas de pedrisco y las heladas han sido las principales causas de los daños registrados.
Andalucía, la Comunidad Valenciana y Castilla y León también han recibido compensaciones por los siniestros sufridos en sus producciones de frutales. Agroseguro ha abonado ya 1,8 millones de euros en indemnizaciones a los agricultores andaluces, mientras que en la Comunidad Valenciana las indemnizaciones ascienden a 1,6 millones. En Castilla y León, los pagos superan el millón de euros, y se espera que estas cifras sigan aumentando conforme se completen las evaluaciones de daños en las producciones tardías.
El año 2024 ha sido especialmente difícil para los agricultores españoles, debido a la alta frecuencia y severidad de los fenómenos meteorológicos extremos. Las tormentas de pedrisco, que afectan directamente a la producción frutícola, han sido particularmente devastadoras, causando daños que en muchos casos han arruinado por completo las cosechas. Este tipo de fenómenos meteorológicos, que cada vez son más frecuentes y destructivos debido al cambio climático, han obligado a los agricultores a depender cada vez más de los seguros agrarios para proteger sus inversiones.
Agroseguro, consciente de esta realidad, ha seguido trabajando para agilizar el pago de indemnizaciones y apoyar a los agricultores en la recuperación de sus explotaciones. A medida que el cambio climático sigue afectando a la agricultura, la importancia de los seguros agrarios se hace cada vez más evidente. Estos seguros no solo proporcionan una red de seguridad para los agricultores, sino que también son una herramienta esencial para garantizar la continuidad de la producción agrícola en España.
Con el pago de más de 64 millones de euros en indemnizaciones ya completado y una previsión de superar los 90 millones al cierre de la campaña, Agroseguro ha demostrado su compromiso con los agricultores españoles, proporcionando un apoyo crucial en un año marcado por la adversidad climática. A medida que se completan las evaluaciones de daños y se abonan las indemnizaciones restantes, la aseguradora continuará trabajando para garantizar que los agricultores reciban el apoyo necesario para afrontar los desafíos del clima y recuperar sus explotaciones.
En definitiva, la campaña de 2024 ha puesto de relieve la importancia de contar con mecanismos de protección como el seguro agrario, especialmente en un contexto de creciente inestabilidad climática. Las indemnizaciones de Agroseguro no solo ayudan a mitigar las pérdidas económicas de los agricultores, sino que también aseguran la continuidad de un sector vital para la economía española y para la seguridad alimentaria del país.