Los productores de ajo asegurados que sufrieron daños a lo largo de la campaña 2015 han recibido indemnizaciones por valor de 5,1 millones de euros. Por comunidad autónoma, 4,7 millones corresponden a la Comunidad de Castilla-La Mancha y el resto se reparte entre las comunidades de Castilla y León, Andalucía y Madrid, con daños que han afectados a 7.
La provincia que se ha visto más afectada ha sido Albacete, con más de 3.813 hectáreas dañadas; le sigue Cuenca, con casi 2.900 hectáreas siniestradas repartidas entre 1.300 parcelas. También se han registrado siniestros, aunque en menor medida, en Ciudad Real y Toledo, con más de 322 y cerca de 305 hectáreas dañadas respectivamente. En el conjunto de Castilla La Mancha la superficie afectada alcanza las 7.230 hectáreas lo que significa el 63% del total sembrado.
La meteorología del 2015 ha sido especialmente desfavorable para este cultivo. Entre otros fenómenos climáticos adversos los productores se vieron afectados fundamentalmente por las intensas tormentas de pedrisco, siendo la ocurrida el día 19 de mayo la que más daño causó descargando entre 18 y 22 litros por metro cuadrado de líquido y granizo en apenas una hora.