A dos semanas de la renovación de la mayoría de los contratos de compra de leche en Galicia, la asociación de agricultores y ganaderos Agromuralla asegura que el precio de la leche para todo el año 2023 “no puede bajar de los 60 céntimos”.
Agromuralla recomienda a sus socios que no firmen contratos por debajo de esa cifra y les pide que “hagan uso del poder de negociación que ofrece la ley y una coyuntura favorable del mercado en el que todavía hay escasez de leche”.
Por ello, Agromuralla pide a los productores “que no se dejen influir por la estrategia premeditada que están llevando a cabo las industrias para intentar revisar a la baja los contratos que vencen el próximo 31 de marzo”.
Incremento no medido de los costos
Agromuralla reclama que «los costes de producción siguen aumentando, por lo que el precio de la leche tiene que mantenerse en los niveles actuales» para que las explotaciones puedan hacer frente a estos aumentos y seguir produciendo leche, justifica su presidente, José Luis Pérez Barreiro.
Según los datos facilitados por la asociación de agricultores, basados en los costes reales de las explotaciones socias, en el último año productos como los fertilizantes han visto triplicado su precio, pasando de 230 €/tonelada en enero de 2022 a 900 € en la actualidad.
Lo mismo ocurrió con el gasóleo, que pasó de 0,73 céntimos a 1,32 € en el mismo periodo (un incremento del 81%), o el recibo de autónomos, que aumentó hasta un 60%, la alimentación (un 31,5%), los plásticos de silos (31%) o electricidad (27%).
“Con estos costes de producción, ninguna explotación lechera debería cobrar menos de 60 céntimos el litro de leche porque estaría en riesgo su viabilidad económica”, dice Agromuralla, ya que “los costes de explotación están subiendo en porcentajes muy superiores a la inflación media”, asegura José Luis Pérez Barreiro.
Riesgo de caída drástica en la producción de leche
La asociación de ganaderos aprovechó la oportunidad para enviar también un mensaje a la industria láctea ya los consumidores. “Si las empresas quieren garantizar su suministro de leche, el precio que se le paga al ganadero no puede bajar porque de lo contrario toda la cadena láctea estará en peligro”, dicen.
“Si el precio de la leche baja 60 céntimos, las ganaderías dejarán de ser viables”, dice Pérez Barreiro, lo que daría lugar de nuevo a lo que Agromuralla define como “Operación Chuletón”, es decir, “el sacrificio masivo de vacas lecheras”. .
“El número de cabezas de ganado no ha dejado de disminuir en el último año, cayendo alrededor de un 8%, y sin vacas es imposible producir leche. Por eso la producción de leche cayó un 3% en el último año en España”, asegura el presidente de Agromuralla. Por eso, dice, “en este momento todavía hay escasez de leche en el mercado, situación que no se va a revertir en el corto plazo”.
“La falta de rentabilidad sufrida en los últimos años ha hecho que el sector sea poco atractivo para las nuevas generaciones, que buscan otras alternativas laborales en lugar de quedarse en las granjas. Hay un problema acuciante de relevo generacional y estas siguen cerrando”, evidencia José Luis Pérez Barreiro, quien afirma que “solo con precios de la leche que permitan a los ganaderos una vida digna habrá jóvenes y muchachas interesadas en seguir produciendo leche”, dice Agromuralla.
En cuanto a los consumidores, Agromuralla les dice que “los profesionales que se dedican a esta actividad no tienen la culpa del aumento de la cesta de la compra”, sino “las cadenas de distribución, que están especulando con los alimentos básicos aumentando sus márgenes de beneficio”.
“Es suicida tirar piedras a quien te da de comer, por eso no entendemos con qué frecuencia los agricultores y ganaderos son atacados injustificadamente por determinados sectores de la sociedad”, argumenta José Luis Pérez Barreiro.
Agromuralla se queja de la aprobación de nuevas normas y una legislación cada vez más restrictiva que dificulta la producción de leche y a un costo mayor. “Cada día tenemos más dificultades para continuar con nuestra actividad diaria”, afirma su presidente.
Además, la asociación de ganaderos acusa al Gobierno Central de fijar el 4% del IVA a las explotaciones lecheras como «una medida propagandística y electoral que no ayudó a bajar el precio de la leche en los lineales de los supermercados» y sin embargo «si a castigar a los productores». “La rebaja del IVA es un esfuerzo realizado íntegramente por el agricultor, reduciendo drásticamente su capital de trabajo a las explotaciones”, denuncian.
Críticas a la Xunta y al Gobierno Central
Desde Agromuralla critican tanto a la Xunta de Galicia como al Gobierno Central por «abandonar a su suerte a los agricultores ante la inminente renovación de contratos».
“La Xunta se dedica a lanzar mensajes triunfalistas y hacer públicos informes de dudosa objetividad, situándose al lado de las industrias y no de los agricultores, mientras que la AICA, dependiente del Ministerio, mira para otro lado ante el flagrante incumplimiento de las las empresas en la presentación de las ofertas a los agricultores, algo que limita claramente la capacidad de negociación de las fincas”, denuncia José Luis Pérez Barreiro.
Agromuralla recuerda que las industrias tienen la obligación de enviar su oferta al productor con al menos dos meses de antelación, plazo que las industrias no están cumpliendo, por lo que pide a la AICA que actúe de oficio ante este «incumplimiento de la ley». » .
