La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha confirmado que agosto de 2025 se ha situado, junto con el mismo mes de 2024, como el más cálido de la serie histórica en España. Con una temperatura media de 25 °C, el pasado mes igualó el récord del año anterior y evidenció la persistencia de un patrón climático marcado por el calor extremo y la escasez de precipitaciones en gran parte del territorio.
Este balance climático, publicado por AEMET y dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), pone de relieve la intensidad y duración de la ola de calor registrada entre los días 3 y 18 de agosto, cuando las temperaturas llegaron a situarse hasta 6 °C por encima de lo normal en todo el país.
Temperaturas: un mes extremadamente cálido
El valor medio de 25,0 °C en la España peninsular estuvo 2,0 °C por encima de la media del periodo de referencia (1991-2020). Este comportamiento se tradujo en un carácter extremadamente cálido en amplias zonas del país, especialmente en Galicia interior, la cordillera Cantábrica, ambas mesetas, el norte y centro de Extremadura, el centro de Andalucía y la Comunitat Valenciana.
La anomalía fue más acusada en el noroeste peninsular, donde los termómetros marcaron entre 2,5 y 3,5 °C por encima de lo habitual durante todo el mes. En Baleares y Canarias, la situación fue más variable, aunque el balance general se calificó como muy cálido.
La ola de calor más prolongada del verano
El fenómeno más destacado fue la ola de calor que se extendió del 3 al 18 de agosto, con máximas y mínimas situadas de forma continua por encima de lo normal. El día 17 del citado mes se alcanzó el punto álgido, con valores medios de hasta 6 °C por encima de la referencia climática.
Las temperaturas más elevadas registradas en estaciones principales fueron:
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Jerez de la Frontera (aeropuerto): 45,8 °C (17 de agosto)
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Morón de la Frontera: 45,2 °C (17 de agosto)
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Murcia: 45,1 °C (18 de agosto)
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Alcantarilla (base aérea): 45,0 °C (18 del citado mes)
En contraposición, las mínimas más bajas se registraron a finales de mes en estaciones de montaña y del interior peninsular:
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Puerto de Navacerrada: 5,3 °C (29 de agosto)
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Molina de Aragón: 5,6 °C (29 de agosto)
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Izaña: 5,8 °C (26 de agosto)
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Burgos (aeropuerto): 7,7 °C (23 de agosto)
Precipitaciones: un agosto seco en la Península, húmedo en Canarias
Agosto de 2025 tuvo un carácter seco en la mayor parte del país. La precipitación media peninsular se situó en 14,4 mm, lo que supone un 66 % del valor normal para este mes en el periodo de referencia 1991-2020. Esto convierte al pasado agosto en el décimo sexto más seco desde 1961 y el séptimo del siglo XXI.
En contraste, Canarias vivió un mes inusualmente húmedo, siendo el quinto agosto más húmedo desde 1961 en el archipiélago.
Distribución territorial de las lluvias
El comportamiento de las precipitaciones mostró contrastes significativos:
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Anomalía seca en amplias zonas del noroeste y centro peninsular.
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Carácter húmedo en el litoral mediterráneo norte y en sectores aislados del suroeste.
Las precipitaciones máximas diarias se registraron en episodios localizados:
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Santander (aeropuerto): 80,8 mm (20 de agosto) → valor más alto de su serie.
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Hondarribia/Malkarroa: 60,1 mm (20 de agosto).
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Barcelona (aeropuerto): 48,7 mm (28 de agosto).
En cuanto al acumulado mensual por estaciones principales, destacan:
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Donostia/San Sebastián/Igeldo: 150,9 mm.
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Santander (aeropuerto): 124,7 mm.
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Hondarribia/Malkarroa: 123,1 mm.
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Barcelona (aeropuerto): 84,4 mm.
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Santander: 72,0 mm.
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Bilbao (aeropuerto): 55,6 mm.
Un doble récord histórico: 2024 y 2025, los más cálidos
La coincidencia de que dos agostos consecutivos (2024 y 2025) hayan alcanzado el mismo récord de 25 °C de media subraya la tendencia de aumento de temperaturas en España, en línea con los efectos del cambio climático que vienen señalando organismos internacionales y nacionales.
Estos datos refuerzan la evidencia de que las olas de calor son cada vez más frecuentes, intensas y prolongadas, mientras que las precipitaciones muestran una mayor irregularidad territorial y temporal.
La situación de 2025, unida a la de 2024, plantea interrogantes sobre la capacidad de adaptación del país a un clima más extremo, tanto en términos de gestión del agua, como de prevención de riesgos para la salud, la agricultura y los ecosistemas.
Conclusión: un agosto extremo que marca tendencia
El balance climático de AEMET para agosto de 2025 confirma que el verano en España se encuentra en una dinámica cada vez más extrema. El calor récord, las olas de calor de larga duración y la sequía persistente en gran parte de la Península dibujan un escenario preocupante que, de repetirse con mayor frecuencia, puede tener efectos estructurales en sectores clave como la agricultura, la ganadería, la gestión hídrica y la salud pública.
La comparación con 2024, con cifras prácticamente idénticas, es un recordatorio de que no se trata de episodios aislados, sino de un patrón climático consolidado.
