La producción de aceite de oliva en estas áreas catalanas ha sufrido una merma, impactando directamente la rentabilidad económica de los agricultores.
El Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentaria (IRTA) está llevando a cabo un proyecto demostrativo denominado «Mejora de la extractabilidad industrial de la variedad Arbequina» en respuesta a la inquietud creciente entre los productores de aceite de oliva en Cataluña, específicamente en las Denominaciones de Origen Protegidas (DOPs) de Garrigues y Siurana. Este proyecto busca abordar la preocupante disminución en los rendimientos industriales experimentados en los últimos años por la variedad Arbequina, predominante en estas dos zonas productoras.
El proyecto se enfoca en investigar múltiples factores que podrían estar contribuyendo a esta reducción, entre ellos, la sequía, la producción superintensiva y cambios en las condiciones agronómicas y tecnológicas. Estos cambios incluyen la anticipación de la cosecha, la adopción de sistemas de producción superintensivos, la transformación de sistemas de riego en plantaciones tradicionales, el aumento de las temperaturas y la maduración de los frutos, así como el proceso de lipogénesis del aceite en los frutos y las condiciones de procesamiento en las almazaras.
Con acceso a datos agronómicos, climáticos y tecnológicos detallados de estas áreas, el IRTA se embarca en la fase final del proyecto, que tiene como objetivo cuantificar las posibles causas que influyen en el proceso de elaboración del aceite de oliva de la variedad Arbequina en las DOPs Garrigues y Siurana. Este proyecto busca proponer medidas concretas para mejorar los rendimientos industriales y fortalecer la economía de los olivareros en estas regiones.
El proyecto, que abarca un periodo de dos años y medio (diciembre 2021 – junio 2024), ha avanzado significativamente en la recopilación de datos reales sobre condiciones de extracción y extractabilidad obtenidas en las principales almazaras de ambas comarcas. Los resultados preliminares, publicados en la revista «Almazaras» del sector oleícola, destacan la importancia de analizar y cuantificar el efecto de las regulaciones sobre la extractabilidad industrial.
Durante la ejecución del proyecto, el IRTA ha trabajado en estrecha colaboración con los productores locales, identificando soluciones sostenibles y efectivas para mejorar la competitividad y la calidad de los aceites de oliva producidos en Garrigues y Siurana. Estas soluciones no solo beneficiarán a los agricultores al fortalecer sus economías, sino que también tendrán un impacto positivo en los consumidores al garantizar la calidad de los productos.
Producción de aceite de oliva
El proyecto no se limita a la investigación y análisis, sino que también se enfoca en la transferencia de conocimientos y resultados al sector y a los productores locales. A través de cursos de tecnología de elaboración y calidad de aceite dirigidos a maestros de almazara y profesionales del sector, así como en jornadas técnicas de transferencia organizadas por el Departament d’Acció Climàtica, Alimentació i Agenda Rural, se busca difundir los resultados del proyecto y promover prácticas más eficientes y sostenibles en la producción de aceite de oliva.
Este proyecto demuestra el compromiso del IRTA con la investigación aplicada y la colaboración con el sector agrícola para abordar desafíos específicos que afectan la producción y calidad de productos agrícolas emblemáticos como el aceite de oliva.
En el contexto del proyecto, los investigadores del IRTA están llevando a cabo un análisis exhaustivo de las condiciones climáticas, ya que se considera que la variabilidad en las condiciones meteorológicas puede tener un impacto significativo en la producción de aceite de oliva. Además, se están estudiando detalladamente las prácticas agronómicas, como los sistemas de riego y las técnicas de cultivo, para entender cómo estas afectan la calidad y cantidad del producto final.
El componente colaborativo de este proyecto también destaca la importancia de la sinergia entre la investigación científica y la experiencia práctica de los agricultores locales. La interacción directa con los productores no solo facilita la obtención de información crucial, sino que también permite una implementación más efectiva de las soluciones propuestas. La transferencia de conocimientos bidireccional entre los investigadores y los agricultores contribuirá a una mejora continua y sostenible en la producción de aceite de oliva en estas regiones. Con este enfoque holístico, el proyecto del IRTA no solo busca resolver los problemas inmediatos de producción, sino también sentar las bases para un futuro más robusto y próspero para la industria del aceite de oliva en Cataluña.
