Unió de Pagesos denuncia que la renta agraria en Cataluña, como consecuencia de la evolución de la Política Agraria Común (PAC), los costes de producción y los precios percibidos en origen, ha disminuido un 39% entre 2001 y 2014 a precios constantes. El sindicato alerta sobre el hecho de que, por lo que se refiere al sector agrario, el Producto Interior Bruto (PIB) en Cataluña ya encadena cinco trimestres seguidos negativos, desde el tercero de 2014 al tercero de 2015, ambos incluidos. Estos datos hacen prever una posible y nueva caída de la renta agraria cuando se calcule la del año 2015. En este sentido, el sindicato pide a las administraciones, tanto catalana como estatal y europea, que pongan en marcha todas las medidas necesarias para conseguir precios justos para la agricultura.
En cuanto a los titulares de las explotaciones agrarias catalanas, han envejecido considerablemente a lo largo de los años, teniendo en cuenta que en 2013 el 38,2% tenían 65 años o más, mientras 20 años antes sólo eran el 24,62%. Por ello, Unió de Pagesos considera imprescindible que las administraciones pongan en marcha políticas activas, con el objetivo de facilitar el relevo generacional para garantizar la continuidad del sector.
El sindicato exige a las administraciones, ante esta situación, y de manera urgente, una regulación de la posición de dominio de la gran distribución y de la venta a pérdidas a lo largo de toda la cadena alimentaria para que el agricultor y el ganadero reciban unos precios justos; que no se deniegue ninguna solicitud de modernización de las explotaciones, ya que el año 2012 y, sobre todo, en 2013, hubo una enorme respuesta negativa a los expedientes de modernización agraria, y en 2014 ni siquiera hubo convocatoria; que se ponga en marcha la nueva legislación que logre que exista transparencia en la fijación de precios en origen, y que la aplicación de la nueva Política Agraria Común beneficie realmente a los profesionales de la actividad y no los absentistas.
