UCCL-Ávila muestra su preocupación por el incremento de ataques de lobos en la provincia abulense en los primeros cuatro meses de 2017

Agronews Castilla y León

4 de mayo de 2017

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En la reunión mantenida ayer, 3 de mayo, en Valladolid con el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, UCCL-Ávila puso de manifiesto su gran preocupación ante los datos vertidos sobre la provincia abulense.

En el encuentro, al que asistió Jesús Muñoz (presidente de UCCL-Ávila y responsable de Medio Ambiente de UCCL), se expusieron datos sobre ataques de lobos y sirvió para analizar el comunicado de la Comisión Europea titulado ‘Plan de Acción en pro de la naturaleza, las personas y la economía’. Mediante dicho comunicado se modifica la Directiva de Hábitat y abre la posibilidad de flexibilizar los mecanismos de control de las poblaciones de lobos al sur del Duero, circunstancia que desde la organización agraria se considera positiva ya que por fin se reconoce desde la UE los graves quebrantos económicos que se están produciendo por esta problemática en la Comunidad y sobre todo en la provincia de Ávila.

Respecto al pago compensatorio por los ataques, el consejero se “comprometió” a pagar las indemnizaciones pendientes de los ataques producidos entre noviembre del 2015 y junio del 2016, periodo que se ha quedado en un limbo y a partir del cual se empezaron a pagar los siniestros en un plazo medio de 23 días.

Entre los datos vertidos ayer por el consejero, cabe destacar que Ávila es la provincia de Castilla y León en el que el número de estos siniestros es mayor, llegando a los 811 en 2016 y aumentando en el primer cuatrimestre de 2017 en 12 respecto al mismo periodo de 2016. Una situación que desde hace mucho tiempo UCCL-Ávila lleva denunciando públicamente y que ve como con el paso del tiempo se va encrudeciendo. Una muestra de ello es la grave situación que se está viviendo en la zona de Gredos. Pueblos como San Martín de la Vega sufren ataques todos los días, llegando a concentrarse en una misma explotación casi una docena en un mes. Además de todas las pérdidas económicas que conlleva, se suma el daño psicológico que produce en los ganaderos.



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