No corren buenos tiempos para el sector apícola, y en este momento no es por la situación del mercado, ni de los precios. La gran preocupación de los apicultores salmantinos se centra esta campaña en el tema sanitario y en el alarmante descenso de producción. A la amenaza que supone para las abejas y los colmenares la presencia, y cada vez más expansión, de la ‘avispa asesina’, prácticamente asentada en toda la zona norte de España, “un problema más, añadido” , como asegura Santiago Canete, presidente de Reina Kilama, se suma la lucha contra la varroa. Otro problema sanitario, casi endémico, que trae de cabeza a los apicultores porque cada vez resulta más difícil combatirla.
Reina Kilama exporta el 90% de su producción de miel y polen
Respecto al mercado, el presidente de la cooperativa serrana que aglutina a 120 socios, afirma que “está bien”, destacando el mercado exterior, al que la cooperativa Reina Kilama destina el 90% de su producción. Sin embargo, la principal preocupación de esta campaña radica en la alarmante caída de producción “debido a la mala climatología, con una primavera irregular y un verano con poco calor, no ha hecho verano”. El año pasado, explica Canete, ya fue un 50% menos que en 2012 y este año “me daría por satisfecho con esa cifra, pero llevamos un 34% menos que en 2013”. Pésima campaña de verano que se suma a la de primavera, marcada por la irregularidad y la escasa producción, “mal en Andalucía, en Extremadura y aquí”. Un desastre, se lamenta.
Rosa Fernández – www.salamancartvaldia.es