La fuerte ola de calor que están soportando las ya mermadas espigas de los cultivadores de cereal españoles y, especialmente, los de Castilla y León, se va extendiendo hacia el norte y ya está afectando con fuerza a las producciones francesas.
Especial incidencia va a tener en los trigos que van a ver como estos episodios térmicos con valores que superan en 10 grados lo que podría ser una temperatura normal mermarán sus rendimientos hasta situarlos por debajo de la media de los últimos cinco años cuando los valores del trigo medio se sitúan en los 7.400 kilos por hectárea.
Especialmente afectada esta la zona del norte del Loira.
Además, esta situación de baja de rendimiento no se ve compensada por la subida de precios como consecuencia de los stocks existentes en el mercado mundial a lo que se suma una producción satisfactoria en la cuenca del Mar Negro.
