Sobre el río Duero que marca y define la bondad de la tierra en esta comarca cercana a la monumental Toro, nos encontramos con la Finca Montelareina una de las más dinámicas y activas que se pueden encontrar en Castilla y León.
Precisamente en las obras del nuevo proyecto, una nave en la que se van a almacenar forrajes prensados, recibe a AgroNews su máximo responsable, José Miguel Inaraja, que nos explica como la explotación cuenta con 900 hectáreas de regadío, “todas ellas irrigadas a través de pivots, completamente automatizados con un sistema informático creado específicamente para nuestra finca”, y otras 300 hectáreas de viñedos, “aprovechando los espacios que quedan entre cada uno de ellos” que nos permiten elaborar más de 3 millones de litros de vino ya sea para la comercialización directa o bien por otras bodegas para las que trabajamos a maquila. Hacemos todo tipo de vino”
[[{«fid»:»42010″,»view_mode»:»media_original»,»type»:»media»,»attributes»:{«height»:2848,»width»:4272,»style»:»width: 450px; height: 300px; border-width: 5px; border-style: solid; margin: 5px; float: left;»,»class»:»media-element file-media-original»}}]]Precisamente, desde el pequeño castillo que domina la finca y que sirve junto con la bodega adjunta de eje fundamental de un interesante proyecto de enoturismo y turismo rural, nos cuenta Inaraja las últimas iniciativas en las que se encuentra inmerso, para lo que cuenta con el apoyo de una firma de prestigio dentro del sector como es Ingeniería Fraile (que se encarga de redactar todos los proyectos técnicos para la tramitación de las distintas licencias, registros y autorizaciones ante los distintos organismos tanto municipales como autonómicos; así como las ayudas y subvenciones que en cada momento pueda haber). “Como ves ahora mismo estamos echando el hormigón que va a ser la base de una nueva actividad como va a ser una planta de tratamiento y de almacenamiento de forrajes prensados que nos va a permitir dar una respuesta idónea a nuestros clientes, algo que no podíamos hacer de la forma que a nosotros nos gusta con las instalaciones que teníamos en Toro. La idea es tener capacidad de almacenaje con una nave de 8.000 metros y trabajar tanto para el mercado nacional con alpacas normales como en el exterior, especialmente con los países árabes, preparando paquetes de gran tamaño”
Esa apuesta por los forrajes es un episodio más de una explotación en la que se han plantado prácticamente todos los cultivos de regadío que el lector se pueda imaginar desde los tradicionales como las patatas, el maíz, zanahorias o la remolacha a otros menos conocidos como el maíz dulce, los guisantes, la remolacha de mesa, y ahora, por ejemplo, fresas o frambuesas. Aprovechando para ello la versatilidad y la disponibilidad de agua que permiten las tres balsas de almacenamiento en las que incluso, comenta José Inaraja a modo de anécdota, “se celebran campeonatos de pesca”
Quizás uno de los aspectos menos conocidos de esta finca y que pueden sorprender al lector es que está registrada desde hace 12 años y que cuenta con 30 hectáreas dedicadas a la producción ecológica, “con la idea, en el corto plazo de ampliar las mismas”
Ahorro energético
La energía es uno de los grandes hándicaps con los que se ha encontrado el sector agrario en las últimas décadas, por lo que la busca del ahorro ha sido una de las claves para mejorar la rentabilidad de las explotaciones. “Aquí, en Montelareina hemos decidido apostar por la energía solar, aunque hemos analizado y hemos estado muy cerca de aprovechar también el viento de la zona”. “Tenemos ya montados 550 kilovatios que nos van a permitir que la bodega sea ya autosuficiente, y ahora, muy en breve vamos a dar el paso para el regadío de la finca con la instalación de otros dos megavatios que nos permitan, en muy poco tiempo, desconectarnos de la red”
