En una reunión a la que han acudido cerca de un centenar de agricultores, presidentes y miembros de la Juntas Agropecuarias Locales y Alcaldes de los municipios más afectados, la Diputación de Valladolid y la Consejería de Agricultura y Ganadería han expuesto las medidas que se han llevado a cabo y las que se van a iniciar en los próximos días para tratar de frenar el número de topillos tan anormal que existe en la actualidad en determinadas zonas de la provincia y evitar que en marzo y abril se conviertan en una plaga.
[[{«fid»:»5947″,»view_mode»:»media_original»,»type»:»media»,»attributes»:{«height»:427,»width»:640,»style»:»width: 478px; height: 319px; border-width: 6px; border-style: solid; margin: 6px; float: left;»,»class»:»media-element file-media-original»}}]]María Jesús Pascual, Viceconsejera de Desarrollo Rural, ha expuesto como en un primer momento en los meses de septiembre no se vío problemas en esta provincia pero como posteriormente como consecuencia de sistema de vigilancia existente se descubrió en determinadas comarcas de Valladolid como la presencia de roedores había crecido, por lo que, tras consultar al comité científico existente se decidió empezar a tomar medidas como fueron la quema controlada de reservorios. Esta medida ha resultado ineficaz como consecuencia de las condiciones climatológicas por lo que se ha decidido, ha asegurado Pascual en su intervención ante los medios de comunicación, pasar a una segunda etapa en la que se van a utilizar motoniveladoras para tratar de acabar con los reservorios de estos animales que se refugian ahora en ellos ante la falta de cultivos en los que cobijarse,
Por su parte, Jesús Julio Carnero, presidente de la Diputación de Valladolid, ha afirmado que se han contratado a ocho que se pretende que trabajen un total de mil horas en cuatro zonas muy concretas como son Campaspero, la zona Sur de Valladolid más allá de Medina del Campo, el norte de Tierra de Campos y Villalón, para acabar con los refugios de topillos.
Con respecto a las quejas mostradas en el día de ayer por organizaciones ecologistas y cazadores, desde la Consejería de Agricultura y Ganadería se ha asegurado que todavía no se ha iniciado el reparto del veneno citado, pero que es un producto que está en el mercado que cualquiera puede comprar pero que lo fundamental es que se aplique correctamente como exige la normativa en vigor al objeto de evitar que pueda causar daños en el resto de fauna.
