Y, ahora, el calor

img 6355

Los agricultores de Castilla y León se las prometían muy felices, y todos nos alegramos, con las oportunas lluvias del pasado mes de abril. Fueron precipitaciones casi a la carta. Respetaron, por utilizar una terminología popular, la Semana Santa y, pasadas estas importantes celebraciones, los cielos se abrieron y el agua cayó con una oportunidad digna de los grandes milagros.

Sin embargo, es sabido que, días de mucho, vísperas de nada, que el campo es un negocio al aire libre y que a la carta, a la carta, nunca se trabaja. De este modo, con el campo regado y el optimismo en el semblante, el sector ha visto cómo mayo llegaba con un intenso calor que ha batido el récord de temperaturas desde que las estadísticas y las mediciones tienen una mínima fiabilidad.

Es verdad que no fueron muchos días y que quizás aún no sea correcto utilizar otro término tan nuestro como es el maldito ‘agostar’ pero, por seguir con los refranes, ahora esperamos, una vez más, la lluvia como agua de mayo.

Aquellos lectores que no se consideren especialmente vinculados con el sector, craso error por su parte, ya estarán diciendo eso de que el agricultor siempre se queja, que nunca está contento con nada, etc, etc… y puede que sea cierto, pero no lo es menos que la situación que les describo es real como la vida misma y todos, campesinos o no, la hemos vivido en carne propia.

 Recuérdense , sin retrotraernos más, las asfixiantes jornadas del 11, 12 y 13 de mayo, suavizadas, eso sí, ya en la celebración de San Isidro Labrador,  nuestro patrón, que no trajo la lluvia pero sí, al menos, entre procesión y romería, refrescó un tanto el ambiente.

Entramos, pues, en una semana decisiva, y no me refiero a la campaña electoral, en la que la tierra no parará de mirar al cielo y en la que se juega el futuro particular de miles y miles de agricultores y del conjunto del PIB de la Comunidad.

Por cierto, hablando de campaña electoral, verán que no he hecho broma alguna sobre la noticia, también contada esta semana por Agronews, de la aprobación de la tudanca como raza autóctona. Ya se me perdonará pero no pasa de ser una broma y, si no hago el comentario, reviento.

Blog de Ángel Cuaresma

Deja un comentario

Share This