El año agrícola en 2016 ha estado marcado, para ASAJA León, por unas condiciones agronómicas razonablemente buenas en la agricultura de secano, lo que propició un considerable aumento de la cosecha de cereal de invierno así como unos buenos rendimientos en toda la gama de forrajes. La climatología fue también propicia, a lo largo de todo el año, para la ganadería extensiva, sobre todo de vacuno y equino, pues a pesar de la fuerte sequía del verano, el cómputo hay que hacerlo favorable dada la buena cosecha de hierba para heno y ensilado y las buenas condiciones de los pastos en los meses de primavera, otoño e invierno, algo a lo que han ayudado las temperaturas suaves de los meses que suelen ser más fríos.
Balance completo: http://www.asajacyl.com/extras/leon/informes/INFORMES_2017/INFORME_A%D1O_2016.pdf
En la agricultura de regadío, destacar los retrasos en las siembras en la pasada primavera cuando, por las incesantes lluvias, se produjo un parón en el campo nunca antes conocido. Estos retrasos en las siembras, que para algunos cultivos fueron de hasta mes y medio, apuntaban a una cosecha desastrosa, pero las favorables condiciones de los meses de septiembre y octubre enderezaron la situación y, sin poder hablar de una cosecha normal, las pérdidas no han llegado a ser tantas como se apuntaban en un principio. Esas abundantes lluvias hicieron que se llenaran los pantanos y que no hubiera ningún problema durante la campaña de riego. Tampoco se produjeron daños destacados por las tormentas. Sí hay que destacar las pérdidas en la producción de fruta por el mal cuajado debido a las lluvias en el momento de la floración, y las pérdidas en la viticultura del Bierzo por la aparición de enfermedades fúngicas a consecuencia de esas mismas lluvias.
Los costes de producción no han sufrido subidas espectaculares, como ha ocurrido en otras ocasiones, pero todos ellos, salvo los piensos, se han incrementado, y la mayoría de las veces sin que existan razones de mercado para ello. Incluso el gasóleo agrícola, después de unos meses con unas cotizaciones bajas que daban un respiro, ha iniciado una tónica alcista en las últimas fechas hasta situarlo de nuevo en niveles que comprometen la viabilidad de las explotaciones.
Los mercados han marcado unos precios de los productos agrarios que llevan a una reducción de los márgenes incluso en esos sectores de menor cosecha, ya que debido a la globalización, la menor producción no significa necesariamente una menor oferta vendedora que tendría un efecto de subida de las cotizaciones, aseguran desde ASAJA Léon. Los precios fueron buenos, o muy buenos, en el mercado de la patata. Precios extremadamente bajos en los cereales, incluido el maíz, y por supuesto en las producciones de leche de vaca y oveja. Ajuste a la baja de los precios de los forrajes después de unos años de buenas cotizaciones.
En materia de política agraria, nada relevante respecto al gobierno de Castilla y León, y respecto al del Estado, lo previsible en un Ejecutivo que estuvo en funciones prácticamente a lo largo de todo el 2016. La principal actividad de ambas administraciones ha sido gestionar las ayudas de la U.E., sin que esa gestión haya supuesto ponerse al día en los pagos comprometidos con los profesionales del campo. Las políticas de modernización de explotaciones y de incorporación de jóvenes sufren un injustificado e imperdonable retraso, como lo sufren las infraestructuras públicas vinculadas a la modernización de los regadíos y a la transformación en nuevos regadíos. INFORME AGRÍCOLA Y GANADERO AÑO 2016 –
