Cataluña ha comenzado la vendimia en diversas zonas geográficas de su territorio. Los primeros uvas se vendimiaron el pasado 8 de agosto en la DO Costers del Segre y en el área vinícola apta para DO Penedès, DO Cataluña y DO Cava. En concreto, las variedades que se están vendimiando en estas zonas son las tempranas Chardonnay y Pinot Noir, para la elaboración de vinos base de espumosos; como también algún moscatel de grano menudo.
Las variedades para elaborar vinos tranquilos y, en el resto de regiones vitícolas, está previsto que empiecen a cosechar dentro de la segunda quincena de este mes de agosto. En general, sin embargo, no se prevé un adelanto de la vendimia respecto al año pasado.
En cuanto al ritmo de maduración, se está acelerando en las variedades tempranas y en tipos de suelos en situación de estrés hídrico, pero se espera que la uva se pueda cosechar en su grado óptimo de madurez.
En el caso de las variedades más tardías, dependerá de la climatología de los próximos días para poder valorar su maduración porque no todas tienen igual grado de resistencia a la sequía. En las variedades que aguantan más la sequía está previsto que la pulpa madure al mismo ritmo que la piel y que haya una buena concentración de aromas y color.
La uva se mantiene, en general, en buen estado sanitario aunque algunas zonas se han visto afectadas por las granizadas o el mildiu. Las condiciones de humedad – precipitaciones – y temperatura pueden influir en el equilibrio de ácidos y azúcares, en la madurez química, pero se cree que la calidad será muy buena.
Según las primeras estimaciones del Instituto Catalán de la Viña y el Vino (INCAVI) se prevé una cosecha similar a la del año pasado en el conjunto de Cataluña. Falta ver cómo evoluciona la madurez física (aumento de peso de la uva) aunque el número de racimos por cepa en algunos casos es ligeramente superior a la media.
