Más de 3.000 ganaderos y 500 tractores alemanes se concentraron ayer, 1 de septiembre, en las calles de Munich convocados por la principal asociación profesional, la BDM, para reclamar tanto a su Gobierno como a Bruselas una solución a la crisis de precios que arrastran tras el final de las cuotas lácteas el pasado 1 de abril.
Este acto de protesta era la culminación de las ocho marchas que se iniciaron el pasado 24 de agosto para demostrar a toda Alemania la complicada situación por la que están pasando estos profesionales.
La desaparición del mercado ruso como consecuencia del veto decretado por Moscú a determinados productos agroalimentarios de la Unión Europea, junto a la reducción de las explortaciones de China y a la excesiva producción mundial, está provocando una reducción de precios que conduce a la ruina, aseguraban desde la BDM, a miles de explotaciones de vacuno de leche alemanas y europeas.
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